Foja de Poesía No. 278: René Morales

 René-Morales[1]Presentamos poemas inéditos de René Morales (1981). Su obra se encuentra en “Espacio en disidencia” (Praxis, 2005), “Bestiario del perro” (Literal 2009) y “Radiografías” (Catafixia, 2010). Su trabajo se ha traducido al inglés para The Journal y al francés para la revista Estuaire.

 

 

i

 

Un día antes del fin del mundo

nos levantaremos temprano 

a ver a los pájaros

 

y nos sorprenderemos

escuchando nuestra respiración

a la mitad de la hierba fresca

 

en ese momento no sentiremos nada

 

sólo esa pequeña gota de lluvia que se estrella

en contra de algo que no puedo definir

 

y la vida no será más que arena que cae

 

un fragmento de pan viejo en la alacena

 

que comerán con paciencia las ratas más pequeñas

 

en ese momento ya sólo seremos un poco de tiempo y sangre

en un lugar inadecuado

 

 

 

 

Guatemala

 

Yo soy Ulises carcomido por la sífilis

Ciego y bueno como una golondrina

que lo ha perdido todo en su infinita pobreza

 

Yo soy Ulises el que amo mujeres tibias

como la espuma en el hocico de los zorros

 

Yo soy Ulises el que sueña con muslos húmedos

en una ciudad oscura

 

yo soy Ulises el que jamás estuvo aquí

 

 

 

 

 

 

Una mujer que no cicatriza como una bala en el cráneo

 

Al final tú con los labios secos por el tabaco negro de una noche aparentemente fría, te me acercarás en silencio para decirme: “moriremos solos”.

 

En ese segundo exacto me despertaré al principio de otra década

                            -viendo las luces de la ciudad sin poder decir nada-

 

 

 

 

 

i

 

Tú y yo no somos de esa gente buena que aparece en los poemas, ya que estamos  hechos de la misma materia que incrementa los incendios de la misma sustancia que le escurre por la nariz a los conejos muertos a palos

 

tengo la seguridad de que tenemos el mismo tipo de sangre podrida

 

                            -somos la cal que asesina todo-

 

el viento envenenado que se pega a la piel de las manzanas

 

                           

                            esto apenas comienza y te aclaro que no es un poema

sino un borbotón de pus en medio de las piernas

 

 

 

levántame el rostro por un segundo

por favor

que quiero fumar

antes de que todo esto también se venga abajo

 

 

 

 

 

+

 

 

Auschwitz  siete de  mayo de 1944

Josef Mengele baila con Perla Ovitzes

antes de enviarla a la cámara de gas

 

30 años después desde una ranchería en Paraguay

recordaría con una ternura inusitada

el bien que hizo al salvar a esa familia de enanos

que le recordaban tanto a su infancia en las calles de Bavieria

 

 

 

+

 

 

Hiroshima seis de agosto de 1945

Sumiteru Taniguchi

sale en bicicleta a entregar el correo

 

unos segundos después

todo se queda en silencio

oscurece a las ocho de la mañana

y comienza a llover

algo parecido al aceite quemado

 

40 años después en el mismo sitio de la explosión nuclear

pensaba nuestro amable cartero

que la mañana era perfecta

para morir con el resto de su familia

 

 

 

+

 

Chernóbil 27 abril de 1986

Anna Korolevskaya

después de salir con sus hijos a ver

los pinos más altos de la avenida Pripiat

sonríe en silencio después de toser

sabiendo al fin que la luz que había visto la noche anterior

no era un incendio sino la navaja de la muerte deslizándose

sobre el cuello de todos los habitantes de su ciudad

 

  

 

 

 

Arriba

más allá de las montañas

más allá de lo imaginable

Dios

como un pastor recién dormido sabe que en el fondo

que sus ovejas simplemente han estado jugando

 

 

 

 

Datos vitales

René Morales Hernández (1981) nació en San Luis potosí pero desde muy chico creció en Ocozocoautla de Espinosa, Chiapas, estudió lengua y literaturas hispánicas en la UNAM, ha participado en numerosos festivales de poesía y su obra se encuentra en los libros “Espacio en disidencia” (Praxis, 2005), “Bestiario del perro” (Literal 2009) y Radiografías (Catafixia, 2010), su obra también se puede encontrar en distintas antologías, vale la pena mencionar que su trabajo se ha traducido al inglés para The Journal y al francés para la revista Estuaire.

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