Antología de poesía colombiana No. 18: Giovanny Gómez

Giovanni GomezEn el marco de la Antología de poesía colombiana, preparada por Federico Díaz Granados, presentamos el trabajo de Giovanny Gómez (Bogotá, 1979). Es Director de la Revista de Poesía Luna de Locos. Su primer libro Casa de Humo mereció el Premio Nacional de Poesía María Mercedes Carranza. Dirige un festival de poesía en Pereira.

 

 

 

UNA PALABRA COMO CASA

 

Señor dame una palabra

que tenga la forma de un barco

un barco de velas inextinguibles

donde pueda ir a conocer el mar

Dame esta palabra por casa

por vestido por amante

deja que ella sea mi soledad

mi alimento y  no pueda sobrevivirla

 

Aquí estoy tan vacío de formas

y silencio…

 

Toda mi inspiración semeja

el ruido de unas manos atadas

necesito un barco por cuerpo

y el amor por mar

 

Escúchame  por estas alucinaciones

y la vastedad de las cosas que vuelven

a su lugar

 

 


 

TIEMPOS

 

Hablo de los días y las noches

del trepidar  de  calles

del  sol  que perjura en sus navajas

Hablo de una llaga en mi espalda

donde  el peso del mundo duele

de  lo único que no  dejan ver  los cristales

del rencor y su transparencia en la sangre

 

Hablo de un animal dormido

y  compases de vals con mariposas en mi alberca

Hablo de no poder  ignorar 

las auroras con sus  muertos

de mis manos sudorosas

de las paredes donde se oculta el amor

del dios que canta en esas orillas

donde se rompen las olas


 

 

 

CASA DE HUMO

 

En algún lugar del mundo encontrarás

que una lágrima recogida en el lecho

unas tijeras abiertas debajo de la almohada

verán esas calles que nos llevan más adentro

cuando los recuerdos a fuerza de no vencer en ti

devuelven  regalos de su propia miseria


 

 

 

VERBA VOLANT

 

Estas puertas abiertas

a la noche del cuerpo

se cierran sin sonido de goznes

Tras ellas el tiempo

fluye en pedazos

y arrecia impenetrable

su rencorosa música

 

Cuando te abandone su rumor

y la sequía de las palabras

sea el espejismo en tu cara

Comprende que no se escapa

por que hace falta el aire

Entre mares y desiertos

lugares invisibles

esperaban los ojos

 

 

 

 

COSTUMBRE

 

Las veces que el río dejó sus zapatos

y corrió desnudo tras el viento

el árbol hizo de su copa las raíces

los pájaros caminaron ebrios

No he conocido de donde viene la risa

sin que deje algunas lágrimas

He visto mis piernas huir de mí trastabillando 

y las lisonjas de tu cuerpo

devolviéndome a un sueño

 

 

 

 

LAS HORAS INÚTILES

 

Si ninguno de los atardeceres es mío

y soy tiempo prestado para la sombra de los árboles

¿cómo llego a mi casa cansado de verme

corriendo tras las puertas

persiguiendo los sonidos que acaricia la lluvia?

                                                          

Con mis propias  letras he arrancado a las piedras

un poco de fuego para las velas de esta noche apagada

 

 

 

 

 

PALABRAS COMO CUERPO

 

Donde el cielo desvanece sus paredes de niebla

la noche respira en las orillas del mar

 

Donde no hay palabras

llega la vida sin resistencia

y todos los días ruidos de cajones carcomidos

con el viento tropiezan

hasta que nadie cree

en el silencio que recuerdas

 

Palabras que brillan en el aire

mordeduras  en la piel

no entienden su voz diezmada

Ignoran qué vuelve  con el flujo de las olas

esa sombra

como barcos que se rompen

 

 

 

 

 

MAS DEVOLVER LA LUZ  ES ENTREGAR DE SOMBRA UNA TRISTE MITAD

 

Si el sueño está ligado al peso de la sangre

cada sueño  se embriaga del lado donde reposa

del origen donde fluye más lento el aire

Si me duermo de un lado

orillas del mar vienen hasta los ojos

y se calla  el viento húmedo

y están livianas las piedras

que vuelven insignificantes

tus pertenencias en el mundo

La visión  puede ser el mareo

una corriente en la que llevando tu vida

se deshacen estas ansias jóvenes de dormir en cualquier lado

porque la sensatez es un barco

que no atraca en ninguna parte

 

 

 

 

DE UN BOSQUE QUE JURAMOS QUEMADO

 

Es inútil saber cuánto esperamos por un amor

cuando la casa se nos viene encima

y los vestidos siguen desnudos

con la risa de una naturaleza que nos tomamos a sorbos

Es este el bosque de la memoria que  juramos quemado

donde el deseo de encontrar

vuelve a lo que alguna vez robaste

en esos sueños 

en esos poemas insuficientes

que no nos sucederán ahora

que no serán nunca

 

 

 

 

CUANDO CADA DÍA LLEGA

A Héctor Lavoe

 

Se me  notan en los labios la mentira

pareciera que alguien en mi boca ríe

cuando la música golpea las paredes

mientras el pecho se desencaja

y el corazón aprieta  las palabras

entre  tanta falta de sueño

El cuerpo se  vuelve pesado

como si  un muerto se llevará por estos estrechos pasillos

donde el espejo nos refleja

 

A veces pienso por qué la memoria      

no me dio tiempo de ver cicatrices 

por qué el dolor

ocupa esta habitación sin poseerla

como una duración de lo invisible

 

 

 

Datos vitales

Giovanny Gómez (Bogotá, 1979). Residente en la ciudad de Pereira desde muy temprana edad. Estudiante de Español y Literatura en la Universidad Tecnológica de Pereira. Director de la Revista de Poesía Luna de Locos como del Cine club Cine en Cámara, Cine con alma. Su primer libro Casa de Humo es reconocido en octubre del 2006, con el Premio Nacional de Poesía María Mercedes Carranza.

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