Presentamos un texto del poeta y ensayista Dionicio Morales (Cunduacán, tabasco, 1943). Ha publicado, entre otros libros, Inscripciones y señales, Retrato a lápiz, Imágenes congregadas, Dádivas, Las estaciones rotas, etc. Ha merecido, entre otras distinciones, el Premio Nacional de Poesía Carlos Pellicer, para Obra Publicada en 2003. Sus poemarios más recientes son El canto del cisne y Tres poemas.
Eras toda la luz reunida
en un vaso de obsidiana
Cuerpo a cuerpo: espejo perfecto.
Puse mi mano
sobre tu desnudez
y se hizo noche.
Dios, momentáneamente,
quedó ciego
y fuimos uno, dos, tres,
ay, tantos fuimos
al amanecer
quedamos huérfanos del mundo.
Y todos los días,
como la vida,
empezamos a partir de cero.