La crítica literaria y poeta Isabel Fraire falleció la mañana de este domingo a los 80 años de edad, así lo confirmó el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) a través de un comunicado.
Nació en Monterrey, Nuevo León, el 30 de julio de 1934. Poeta. Estudió en la FFyL de la UNAM. Ha sido miembro del consejo de redacción de la Revista Mexicana de Literatura. Traductora de Eliot, Pound, Spencer y Stevens. Colaboradora de Diálogos, Katarsis, La Semana de Bellas Artes, México en la Cultura, Plural, Proceso, Revista Mexicana de Literatura, Revista Universidad de México, Sábado y Siempre!. Becaria de la Fundación Guggenheim, 1977. Premio Xavier Villaurrutia 1978 por Poemas en el regazo de la muerte. (ELEM)
como un inmenso pétalo de mangolia
se despliega la luz de la mañana
no hay casas no hay pájaros
no hay bosques
el mundo
ha quedado vacío
hay solamente luz
yo creía que la muerte era una forma más de ser
y no la otra cara de las piedras presentes
busqué debajo de tu rostro la sonrisa de mi infancia
y hallé el guante enlutado de tu madre
tus palabras botaban como canicas por las escaleras del silencio
hasta los pies de mi alma momificada por tu gesto
se abrió la tierra y se tragó los pájaros del alba que contenían tus manos
y una marea de miedo inmóvil te cubría
la muerte se asentaba en los poros del día
y yo, vigilante impávido, presenciaba
la desintegración del universo
Breve incendio de pájaros agudos
con la aurora en el pico caen muertos
bajo una andanada de papeles
fechas, citas, silencios.
El gigante del mundo crece, hueco
con un niño en los brazos
de ojos grandes abiertos
que nace cada día, decapitado.
Se han tapado las bocas con escombros
los ojos se han nublado
las manos se entreabren y entrecierran
y en estremecimientos sucesivos
se sacuden la carne y los deseos.
Cada día la historia es más antigua
las palomas más nuevas cada día se repiten
el milagro se empolva en un momento.
El tiempo se acelera, estrechando su órbita
sin futuro, de círculo cerrado.