Lêdo Ivo en Valparaíso Ediciones de España

Valparaíso Ediciones, una de las editoriales españolas más pujantes actualmente, dirigida por Javier Bozalongo, ha publicado “Estación final, Antología 1940-2011” de Lêdo Ivo (1924-2012), con la traducción y el prólogo del poeta Mario Bojórquez. En seguida tres magníficos poemas del libro. Los libros de Valparaíso se encuentran en todas las librerías de España y, en la compra de dos libros, el envío es gratis a todo el mundo. http://valparaisoediciones.es/

 

 

 

Vals fúnebre de Hermengarda

Aquí estoy junto a tu sepultura, Hermengarda,
para llorar tu pobre carne pura que ninguno de nosotros
vio pudrirse.
Otros vendrían lúcidos y enlutados,
sin embargo yo vengo borracho, Hermengarda, yo
vengo borracho.
Y si mañana encontraran la cruz de tu tumba tirada por
el suelo
no fue la noche, Hermengarda, ni fue el viento.
Fui yo.
Quise amparar mi embriaguez en tu cruz,
y me arrastré en la tierra en que reposas
cubierta de margaritas, de todos modos triste.
Aquí estoy junto a tu tumba, Hermengarda,
para llorar nuestro amor de siempre.
No es la noche, Hermengarda, ni el viento.
Soy yo.

 

 

 

 

 

Justificación del poeta
Padre, mis pensamientos no caben en tu sala con piano
tranquilo a un lado y oscuras sillas vacías cerca de la ventana
mis inquietos pensamientos no caben en la salita con flores muriendo en los jarrones y paisajes sonriendo en las
     molduras
deja que ellos se muevan más allá de las cortinas azules y caminen mucho más allá de las ventanas abiertas
deja que se mezclen con el calmo resplandor de la luna
no te preocupes si los demás se espantan con tu hijo de ojos vivos y cabellos siempre desaliñados
no te preocupes si recito poemas cuando la noche cae
el tiempo no existe en el alma del poeta
todo es universal y abarca todos los tiempos
los poetas, papá, son los corazones del mundo
son las manos de Dios escribiendo los poemas del mundo inseguro
no importa, papá, que digan que estoy loco
que lloro recargado en los puentes y me conmuevo en los teatros
que pregunto por la oscura Adriana cuando la madrugada baja
en silencio
en silencio
los poetas son los pianos del mundo
sólo ellos permanecerán inalterables delante de las musas y de Dios
sólo ellos tendrán la noción de la agonía del mundo
ayer un niño español fue despedazado por una bomba
mañana se encontrarán poemas en el bolsillo del suicida soñador
mientras tanto las grúas trabajan incansablemente día y noche
y los obreros fatigan sus brazos y sus piernas
ninguna oscilación habrá en la Poesía
ella quedará en equilibrio porque los ritmos la amparan
y Adriana no se prostituye.
Soy una elección. Soy una revolución.

En un burdel

El mundo es rumor y exageración.
La puta que gime en la cama
dice que te ama.

También puedes leer