En el marco de la serie “Poesía argentina”, preprada por Nicolás Pinkus, presentamos la poesía, incluidos algunos inéditos, de Nicolás Cambon (Quilmes, 1978). Publicó Mognolia (2001), Los guesos con punta y Los icebergs (2005), Los escarbadientes (2008), y el poemario a dos manos con Martín Pucheta, Sonajero de misterio: los tomuer (2010).
(inéditos)
1
Dijeron en telediario:
el desprendimiento de gases
de la bosta de vaca
sería el causante
del recalentamiento global.
Habría entonces que aislarla?
En tanques sellados
que viaje la bosta
a la estratosfera.
Que orbite la bosta que entibia
que produce el veranito
que no les gusta del todo
a los modernos de greenpeace.
Vaya la bosta entonces al cielo efímero
giratorio
mas bien el purgatorio.
Allí, donde no pasa el tiempo
no habrán vivos pero nadie se muere.
Tampoco hay detergentes biodegradables,
porque nada se degrada.
Solo orbita la bosta
enlatada
conserva por los tiempos de los tiempos
incorruptible como las reliquias de los santos.
Junto al cadáver de Laika,
y las descargas de los baños químicos
de las naves espaciales.
2
es un mito que los archivos judiciales
sirvan solo para alimentar ratas.
No son queso,
no,
son cagaderos de ratas.
hijo de boga
hijo de juez de paz
hijo de poli
hijo de dirigente radical de renombre
el estado alimenta
como a los gansos
que inyectan
hasta que revientan
les sale comida por las fosas nasales
antes que por el culo
hordas de comefolios.
gustito a tinta roja de sello
entrado
sellado
foliado
rubricado
duplicado
triplicado
Las pobres ratas.
si apenas se limpian
cuando cagan
entre las actuaciones judiciales.
3
El hijo de mil puta
de Isaac Rojas
sobrevoló una tarde plaza de mayo.
Mató trescientos y tantos
sin contar el colectivo escolar.
Durante el gobierno de Menem ponen
una placa de bronce
sobre el revestimiento
de la fachada del Ministerio de Economía:
No sé que cosa
las heridas de este mármol fueron fruto
el desencuentro y la intolerancia
el registro de sus huellas
la memoria
el futuro de grandeza
la nación.
Resulta que el revestimiento de la fachada
cagado a balazos
no es un mármol. Es un granito.
El granito es mas duro
tiene menos resistencia mecánica
es mas barato que el mármol.
Dice Perón esa tarde: vuelvan a su casa.
Volvieron todos
salvo los trescientos y pico,
el colectivo escolar,
y el rengo.
4
Una pareja mayor sale a cenar con su hijo.
Bellísimo, parece
una chica de doce.
Cuando entraron pensé que era
una chiquita hermosa,
y lo era.
Sentados uno al lado del otro
frente del padre cada segundo mas viejo,
la madre
acaricia el pelo rubio y largo
a su hijo
mientras esperan la comida.
Enrula el pelo lacio en el dedo índice.
Les sirven la comida.
El chiquito pelusa
niñita hermosa
come sin levantar la cabeza
sin mirar
como recién vuelto de la guerra.
Como una bestia,
un sentenciado a muerte,
un animalito,
a quien se engorda para comer.
5
Los camioneros que paran cerca de casa
secan las toallas que usan,
tamaño mano,
felpa naranja guarda azul,
colgadas de las ventanillas entreabiertas.
Pequeño mundo
del camión a la parrilla
se quedan hasta tarde bebiendo,
comen un asado durante horas.
Los viernes hay número en vivo.
Pequeño mundo
el camión estacionado
frente a la parrilla.
A mitad de la conversación se quedan pensando les camioneres
y, ahora vengo,
suben a la cabina del camión,
bajan de la cabina del camión,
un par de fotos en la mano.
Nada hace falta nada en la vida
que no quepa
en la cabina de un semi.
de la plaquetita “los escarbadientes”
6
Quiero acordarme del nombre pero no puedo
de una multi,
que fabricaba pesticidas
en un polo industrial de la india.
Como si dijera dow chemical,
un accidente.
Se largan al aire
tonelada y tanto de gas al aire.
Como el relleno de todos los matamoscas en aerosol,
sin aerosol,
como un gheiser, una vertiente natural,
como espesar el caldo que se respira en verano,
mata
ocho mil primero,
y el efecto veinticuatro horas de frescura
dieciséis mil después.
Un nombre en inglés y compuesto.
Trabajan doce horas
Comen una vez por día,
Aerosol o nó
los tipos caen como moscas.
7
En el santuario del cantor
que se apellidaba bueno,
igualito que en el cementerio de Francia,
la gente fornica con la estatua del muerto.
Se turnan,
primero las niñas
piden
les conceda fertilidad.
Bueno, Bueno.
No mucho mas para decir.
8
un avioncito ultraliviano
después de tomar profundamente aire,
logra volar alto,
mas alto,
que cualquier otro avión.
ya arriba
sobre la cara superior del ala
se posa la sombra
de otro aeroplano.
cuando el piloto desciende
los de la torre de control dicen
no haber visto nada.
desde abajo no se vería la sombra,
pero no hubo otro avión.
el hombre se pregunta,
si en todo caso,
lo que haya visto sea
la sombra de las cosas
reflejadas en la atmósfera.
lo que vemos es la sombra que proyectan las cosas
en el espejo cóncavo
de la capa
que delimita
la atmósfera,
o algo así,
el hombre dice en conferencia de prensa.
los periodistas se quejaron de lo poco
de alimento sólido
que acompaña el jugo
que ofrece
la empresa de catering.
Peor el día que les dieron
la comida
de la dieta
de los astronautas.
9
los que practican golf
en los campos municipales de golf
comentan
cada tanto a sus caddies
la luna
parece
una pelota de golf
suspendida en el cielo.
piensan
para sus adentros
estos negros no entienden
nada de poesía.
10
Los días en que la gente
que tiene caballos los baña
igual que a los autos,
los sacan a la puerta de su casa
un balde,
entran a la casa,
salen con cepillo y se sientan.
Recién después
de arriba hacia abajo,
mientras se aprovecha la estadía
en la vereda
para mirar mejor
lo que mas o menos se ve desde dentro.
Pasa un vecino con su caballo caminando,
-que tal vecino-
y el caballo descuelga
la monumental estructura telescópica
de su verga
para mear.
Levantando el ceño el vecino:
-lindo bichito-
-gracias. También el suyo-
Todo el domingo limpiando
todo,
salvo el caballo,
que piensa
un pajarito
se pose
sobre su lomo.
Datos vitales
Nicolás Cambon, nació en Quilmes, provincia de Buenos Aires en 1978. Arquitecto. Publicó Mognolia (2001), Los guesos con punta y Los icebergs (2005), Los escarbadientes (2008), y el poemario a dos manos con Martín Pucheta, Sonajero de misterio: los tomuer (2010). Todas ediciones de autor autogestionadas. Participó de Felicidades también, 18 poetas (antología colectiva del taller coordinado por Diana Bellesi en la Casa de la Poesía, 2004), “Última poesía argentina” (Ediciones en Danza, 2008) y “Poemas con famosos” (Aranga Ranga, 2010).