Murió Fidencio González Montes

Fidencio González Montes

El escritor Fidencio González Montes (Poza Rica, 1954), falleció el pasado 4 de julio a los 58 años, debido a complicaciones originadas en diabetes. Es autor de novelas como El ritual de la banda: andanzas de una joven sin pelos en la lengua (2010), ganadora del Premio Literatura Juvenil Gran Angular 2010, y Por sobredosis (2009). Dejó terminada, pero sin publicar, la novela El hombre de Chernobyl, y también El histrión, escrita gracias a una beca del Instituto Veracruzano de la Cultura que recibió en 2011. Acababa de elaborar los guiones de cuatro historietas para la Procuraduría General de la República, dos sobre la violencia contra las mujeres para nivel primaria y secundaria, y dos sobre la trata de personas para secundaria y media superior. González Montes estudió periodismo y comunicación colectiva en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México. Fue reportero de la sección cultural del periódico El Nacional, y colaborador de El Gallo Ilustrado, El Universal y Excélsior, La Brújula en el Bolsillo, Punto y Sábado. En 1982 recibió el Premio Hispanoamericano de Cuento INBA porLos sonámbulas del bello infierno(SEP/Crea, 1985) y obtuvo el primer lugar del segundo Concurso Nacional de Cuento Ciudad de Durango 1997, el Premio Nacional de Cuento de la Bienal de Yucatán 2007. Otros libros de cuentos publicados son Arqueros que apuntan al sol (Plaza y Valdés/INBA/DDF/UAM, 1988) yTrágico a medias (CNCA, 1999). También escribió para niños, como La última vida de un gato y otras historias (Ediciones Castillo, 2000). Influenciado en sus años mozos por José Agustín, González Montes expresó (La Jornada, 21/8/11): “Cuando leí La tumba, n’hombre, quedé impactado. Dije, voy a ser escritor porque uno puede escribir cualquier reventón, cualquier cosa loca que a uno se le ocurra, siendo que antes había ese prejuicio que tenía uno que ser científico –así pensaba– como Julio Verne, y hacer teorías para después escribir un libro”.  Fuente: La Jornada.

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