Presentamos una muestra del poeta colombiano Juan Sebastián Sánchez. Nació el 12 de marzo de 1987 en la ciudad de Medellín. Poeta y director de la revista virtual especializada en literatura Hormigón Editorial. Miembro del colectivo Poesía orgánica como orientador cultural del movimiento en el municipio de Itagui, Antioquia. Actualmente tiene dos libros inéditos de poesía llamados Palabra en la sombra y Canto a las cosas sin memoria.
La palabra
Alguien tira de la palabra
por la calle
carga la sombra que rompió
la voz en la piedra
la soledad del bolígrafo
los vacíos de la tinta
los poetas colgaron la palabra en los faroles sin aceite
en los mercados sin aplauso
en el nudo que ataron los zapatos al olvido
la palabra no se ha pronunciado
quién sabe más
que aquel que guardó silencio
Otredad
A Deyvi Gutiérrez
La lluvia no tiene
otra razón mas que apagar
los aplausos
la fotografía no tiene
otra función mas que mostrarnos
el vacío donde nadie mudó la piel
será que la palabra
encendió el oráculo que nadie señaló
y la calle habitó el paso que tanto fue esquivo
alguien nos dejó el amuleto equivocado
y partió
mirándome al espejo
mi sombra ha creado otra sombra
toda la soledad de la humanidad
en este último acto
Rito
No muere quien pone
en otra llaga la sombra en ruinas
quien padece la espera
de lanzar la flecha sin cuerpo
tampoco quien descubre el camino
batiendo en la palma de la mano
el designio sin oráculo
no muere quien se ha sentado en silencio
a escuchar el canto del pájaro
y logra comprender la palabra
con lo cual se escribieron todos los miedos
Vientos de alerta
A Pedro Arturo Estrada
Qué tiempo es éste
donde la sombra alimenta
las ruinas del cuerpo hambriento.
Donde la silueta corre
en el abrazo que se deshace
como vapor sobre las manos.
Qué espacio es éste
donde los rieles conjuran
la memoria de los cuerpos abatidos.
Donde los transhumantes
saben el ritual de cargar en la mirada
la forma de un rostro equivocado.
En tiempos modernos quién sea poeta
encienda el aceite de las palabras apagadas.
Rito del retorno
Esperar en el parque
no sé qué temblor de hojas
derrumbe los pasos en la piel.
No sé qué frío o qué charco
refleje la cuenca que nunca fuimos.
Esperar en el parque,
creer que vale la pena
esta arcilla rota de oscuridad.
Y caminar
entre nosotros
a la espera de una palabra
— sin regreso.