Porque cada generación debe traducir a sus clásicos presentamos, en versión de Juan Carlos Cabrera Pons (San Cristóbal de las Casas, Chiapas, 1986), algunos textos del poeta valenciano Ausiàs March (1397-1459), el mayor poeta europeo del siglo XV. “Lir entre Cards” es uno de sus libros fundamentales. Estas versiones fueron revisadas junto a Lola Badia, especialista en March.
XXIX
Sí com lo taur se’n va fuyt pel desert
quant és sobrat per son semblant qui·l força,
ne torna may fins ha cobrada força
per destuir aquell qui l’ha desert,
tot enaxí·m cové lunyar de vós,
car vostre gest mon esforç ha confús;
no tornaré fins del tot haja fus
la gran pahor qui· toll ser delitós.
XXIX
Así como el toro huye por el desierto
al ser superado por su semejante que lo fuerza,
no vuelve ya hasta tener la suficiente fuerza
para destruir a aquel que lo ha perjudicado,
así pues, a mí me conviene huir de vos,
pues vuestro gesto mi esfuerzo ha confundido;
no volveré hasta que del todo se haya esfumado
el gran pavor que me impide ser dichoso.
LXXX
Tot laurador és pagat del jornal,
e l’advocat qui pert lo guanyat plet.
Yo, per servir Amor, romanch desfet
de tot quant he, que servir no me’n cal;
he fet senyor del seny a mon voler,
vehen Amor de mon seny mal servit;
rapaç l’é fet e Déu a part jaquit,
e són setz·anys que lo guardó esper.
Amor, Amor, poch és vostre poder
per altre hom com yo fer tant amar;
anau, anau vostres armes provar
en contra·quell qui vostre no vol ser!
LXXX
A todo labrador se le paga el jornal,
y al abogado que pierde el pleito ganado.
Yo, por servir a Amor, quedo despojado
de todo cuanto tengo, que no me falta servir;
he hecho señor del juicio a mi querer,
al ver a Amor por mi juicio mal servido;
rapaz lo he hecho, y Dios dejado aparte,
y son dieciséis años que espero el galardón.
Amor, Amor, poco es vuestro poder
para hacer amar a otro tanto como yo;
¡andad, andad a probar vuestras armas
en contra de aquel que no quiere ser vuestro!
LXXXI
Axí com cell qui·s veu prop de la mort,
corrent mal temps, perillant en la mar,
e veu lo loch on se pot restaurar
e no y ateny per sa malvada sort,
ne pren a me, qui vaig affanys passant,
e veig a vós bastant mos mals delir.
Desesperat de mos desigs complir,
iré pel món vostr·ergull recitant.
LXXXI
Así como aquel que se ve cerca de la muerte,
corriendo mal tiempo, peligrando en el mar,
y ve el lugar en que puede salvarse,
mas no lo alcanza por su malvada suerte,
me ocurre a mí, que voy pasando afanes
y veo que bastáis para aliviar mis males.
Desesperado por cumplir mis deseos,
iré por el mundo recitando vuestro orgullo.
LXXXII
Quant plau a Déu que la fusta perequa,
en segur port romp àncores y ormeig,
e de poch mal a molt hom morir veig:
null hom és cert d’algun fet com fenesqua.
L’ome sabent no té pus avantatge
sinó que·l pech sol menys fets avenir.
L’esperiment y ells juhís veig fallir;
Fortuna y Cas les torben llur usatge.
LXXXII
Cuando le place a Dios que la nave perezca,
en puerto seguro rompe áncoras y jarcia,
y de poco mal veo morir a muchos:
nadie es cierto de cómo termine algún hecho.
El sabio no tiene mayor ventaja,
sino que el necio suele atinar menos hechos.
Veo fallar a la experiencia y al juicio;
Fortuna y Azar les turban sus costumbres.
LXXXIII
Si co·l malalt qui lonch temps ha que jau
e vol hun jorn esforçar-se llevar,
e sa virtut no li pot molt aydar,
ans, llevat dret, soptament, plegat, cau,
ne pren a mi, que m’esforç contr·Amor
e vull seguir tot ço que mon seny vol;
complir no u pusch, perquè la força·m tol
un mal estrem atraçat per Amor.
LXXXIII
Así como al enfermo que ha mucho tiempo yace
y un día quiere esforzarse en levantarse,
y no puede su virtud mucho ayudarlo,
antes, puesto en pie, súbitamente, cae doblado,
me ocurre a mí, que me esfuerzo contra Amor
y quiero seguir todo lo que mi juicio quiere;
no puedo cumplirlo, porque me quita la fuerza
un mal extremo causado por Amor.
LXXXVI
Si·m demanau lo greu turment que pas,
és pas tan fort que·m lleva·l dir què pas,
y és d’admirar, passant, com no·m trespasse
ingratiut, portant-me·l contrapàs.
May retrauré de vostr·amor un pas,
puix en seguir a vós, honesta, medre;
y si rahó me fa contrast, desmedre,
y és-me lo món, sens vós, present escàs.
Passe, penant, un riu de mort lo dia,
y en ser per vós, me dol fer curta via.
LXXXVI
Si me preguntáis el gran tormento que paso,
pasa tan fuerte, que me impide decir qué paso,
y es de admirarse, pasándolo, que no me traspase
la ingratitud, llevándome el contrapaso.
No retraeré jamás de vuestro amor un paso,
pues en seguiros, honesta, medro;
mas si me hace contraste la razón, desmedro,
y me es el mundo, sin vos, un don escaso.
Paso, penando, un río de muerte, el día,
y en ser por vos, me duele hacer corto camino.