Iniciamos el dossier Muestrario de Panamá o poesía en las esclusas. 13 poetas Caribe Istmo-Pacífico, preparado por Javier Alvarado. La primera muestra de esta antología de poesía panameña es Giovanna Benedetti (Panamá, 1949). Ha ganado el Premio Nacional de Literatura “Ricardo Miró” en 1981, 1984, 1992 y 2005 en las categorías de ensayo, cuento y poesía. En 1991 obtuvo el Premio Nacional de Periodismo “José Martí”, en Cuba.
génesis de abya yala
El nombre de América, aplicado a nuestro
continente es reciente… En el idioma de la nación Dule,
se le conoce y se le seguirá conociendo por su
verdadero nombre: Abya Yala.
Arysteides Turpana
Madre
y padre piedra:
continente.
Hermano del silencio,
hijo del río.
Compañero de sombra,
escucha:
en el principio era el mar
lento como el abismo.
Entonces
fue la noche
y vino el verbo
y hablaron en sus sueños
las palabras:
¡Sea esta tierra dulce
como la piel de caña!
Y fue Abya Yala
la de la vulva de agua
y volcanes como pechos
(primer día).
Creció Abya Yala
inmensa desde su árbol florido.
El sol volcó su espuma
y engendró entre sus playas
muchedumbres de orquídeas.
Y fue su concha viva
viva fuente
ombligo primigenio
y hubo luna menguante
(día segundo).
Y dijo el Huracán:
¡Reviente
el firmamento
y haya tormenta
y caiga el aguacero
y hierva el continente
de lagartos, de iguanas
y de grillos;
y sean sus bestias
tantas como estrellas!
Y así fue.
Cayó la lluvia a flechas
sobre las sementeras
y zumbaron en las miasmas
las libélulas, las ranas,
los zancudos.
Y hubo en los cardinales
trópicos y nieves
y desiertos y pampas y arco iris
(día tercero).
¡Hágase el jaguar —dijo la luz—
y se hicieron las selvas.
¡Sea el relámpago
la lengua de los valles!
y surgió la anaconda como un río.
¡Vuele hacia el amanecer
el cóndor
y sean sus alas nubes!
Y alzáronse los Andes hasta el cielo.
¡Vénganos un dios!
—gritó la sangre—
y fue el pájaro quetzal, libre y altivo.
Y hubo en los altiplanos
pedernal de fuego nuevo
y serpientes emplumadas
(cuarto día).
El Corazón de la Montaña
habló sobre las serranías:
¡Que sea el maíz
el polvo de mi carne;
que broten de su espiga
los murmullos
y de sus granos
el hueso y la simiente!
Y conmoviéronse
los péndulos
en sus callosidades
y salieron los pellejos
de las grietas
y hubo en sus alfabetos
sangre coagulada
y fueron sus cenizas
macho y hembra.
(quinto día).
Ciñéronse sus lomos
los hijos del follaje.
Milenios de cal y canto
guardaron sus madreperlas
y del hueco de las sombras
hicieron sus paisajes.
¡No prevalecerá
otro nombre en mi conciencia
ni quedará en tus huellas
piedra sobre piedra!
Dijeron,
en sus ruinas, las tinieblas.
Y fue Abya Yala
territorio enigma.
Término de Oriente
y de Occidente.
Y quedaron sus arcanos
sellados para siempre
(sexto día).
señora de la ubicuidad
Hiératicas
con sus antorchas,
se parten en espiral
las avenidad de ojos vivos,
las pupilas de ascuas
crudas,
las lenguas bífidas
que van apareciendo
y desapareciendo
como escorpiones,
como orquídeas
que crecen y se asoman
y salen lascivas
de sus oscuridades.
Allí están,
mirándome
con sus cabezas triangulares
negras, verdiazules,
roja sangre coagulada
que brilla
sobre pellejos
fríos de escama
y plumas
y nácar.
Y yo sé
que son las mismas:
las espléndidas
aladas
las antiguas;
son las nagas, nagalis
son las nazcas,
las naguas
son las nahoas
las míticas nagualis
(son los
disfraces
de los dioses)
las pieles de agua recurrente,
es la ofídica Na-Coatl.
Y es Naxcit,
el árbol
renaciente
de la ubicuidad
(tiempo y espacio)
tronco umbilical del jenené.
Y es Nuah
la creadora,
la primera, abuela
y anciana de los días,
arcana de los siglos,
madre y padre a la vez.
Y son esas mitológicas
y ctónicas nepay,
las jepas,
las jubas,
las kan
y las cha.
Y son las grandiosas napas
y es también el uivre
el rayo (el ruach)
que vibra
que transita
por las profundidades
que germinan.
Y es también
la rítmica Nimac-can
y es Cumatz
que es la memoria
del agua primitiva,
el lago serpentino
entre los tiempos contínuos.
Ellas son
las creadoras
y son las formadoras.
Ellas son
las que trajeron
en su aliento la palabra.
Y es la ardiente Nay-Amáru
guardiana del misterio;
y es la celeste y titánica Naboia;
y es la perpetua
Anaconda, relámpago del río,
la inmensa
la monstruosa
Señora de la Ubicuidad.
loltum, la flor de piedra
Loltum: “flor de piedra” en lengua maya. Nombre de una caverna ritual de iniciación situada en la península de Yucatán.
Como vulvas en la roca
como sensuales gargantas
como espeluncas vacuas
embudos subterráneos
vientre socavados
de rupestres furnias
como cúpulas
a hurto de lubricidades
como profundas cuevas
de sílice y de cuarzo
abrigaduras
túneles
catacumbas caladas
hasta los sáxeos imanes
de la peña viva
empellejadas de herrumbre
y fermentos
de los mármoles
como arterias sibilinas
como venas recónditas
por donde circula el tiempo
por debajo
de la tierra
como sótanos inmensos
por donde pasa a sombra
la luz de las entrañas
en sus antiguos
cálices de huesos
y de agua
como grietas de mina
donde sudan los cristales
de cuarzo y antracita
y se se destroncan
los abismos
de esmeraldas
como huertos prohibidos
como una recurrente
cascadura
del espejo:
Loltum
como una flor consciente
imaginada en piedra
el canto de la noche
Nota: este poema está basado en una ceremonia tradicional del “Canto de la Noche” o “Fiesta de la Chicha Cantada”, oficiada por un jaibaná (chamán), de la cultura chocó que habita el territorio selvático del Darién panameño y el litoral del Pacífico colombiano.
Avive el fuego en la noche
sople el viento en la montaña
lleguen los jais de mi tierra
(ya vienen..)
venga la selva cantando
salga la sombra del sueño
(ya sale…)
llore el agua en la quebrada
(ya llora…)
venga aquí a soñar la chicha
(ya sueña…)
cante la chicha conmigo
(ya canta…)
Viento de agua llame al trueno
venga el trueno traiga el fuego
(ya trae…)
salgan los jais de la noche
canten la chicha conmigo
(cantan…)
…ayayai ayayaiii
fuegoooo/aguaaaa
adauii adauiii…
Brujo jaibaná yo canto
noche tierra/avive sueñe
sueñe jaibaná maestro
cante jaibaná soñando
…jai jai majuidichi
jai jai jai majuinará
jaibaná tigre
tigre imamá…
Venga ahora/oiga llegue
traiga chicha /chicha tome
chicha pildé/tonga intúa
chicha fuerte borrachero
…que yo soy brujo
tigre/imamá
jaibaná tigre
brujo/antumiá…
Venga sapo/sapo feo
sapo-borokó del monte
venga sapo-memburé
sapo-memburé del río
llegue cante sapo grande
venga yo le mando a usté
(ya viene…)
sapo-borokó
bajío/curcumiá
sapo-meburé
bajío/ burumiá
Que yo soy jaibaná tonguero
yo mando a usté/yo le ordeno:
yo soy jaibaná
yo canto
yo sueño la noche
(sueña…)
jai jai jai
majudichí
jai jai jai
tigre imamá
brujo antumiá
aribamiá
Que yo canto aquí la noche
que yo soy el que canta chicha
yo llamo al bidigomía
al dueño de la montaña
salga ya bidigomía
salga que le quiero ver
(ya sale…)
jai jai jai
bidigomía
no sale más/ya no más
Que yo soy brujo
brujo/imamá
que yo soy tigre
tigre/antumiá.
Datos vitales
Giovanna Benedetti (Panamá, 1949). Estudió Derecho y Ciencias Políticas, especializándose en Derecho de la Cultura y Derecho de Autor en las Universidades de Panamá, Autónoma de Barcelona y Complutense de Madrid. Ha ganado el Premio Nacional de Literatura “Ricardo Miró” en 1981, 1984, 1992 y 2005 en las categorías de ensayo, cuento y poesía. En 1991 obtuvo el Premio Nacional de Periodismo “José Martí”, en Cuba. Su obra ha sido traducida al inglés, alemán, francés y húngaro. Es además escultora, ceramista y diseñadora digital gráfica. Ha publicado la colección de cuentos “La lluvia sobre el fuego” (1982); los ensayos “El sótano dos de la Cultura” (1985), “Camino de los Andantes: Bolívar y Don Quijote” (1997) y “Lorca: el pentagrama poético de su infinito” (1998); y los poemarios “Entonces, ahora y luego” (1992) y “Entrada abierta a la mansión cerrada” (2006).