Presentamos, en el marco del dossierde poesía norteamericana actual, preparado por Francisco Larios, textos de Lynn Melnick. Publicó en 2012 If I Should Say I Have Hope (YesYes Books). Es co-editora, junto a Brett Fletcher Lauer, de la antología Please Excuse This Poem: 100 New Poets for the Next Generation (Viking, 2015). Enseña en el centro cultural 92Y de Nueva York, y es Directora de Medios y Relaciones Comunitarias de la organizaciónVida: Mujeres en la Literatura.
Paisaje con declaración escrita
Envuelves mis costillas en gaza—
un experimento con la palabra tiernamente
después de que tus manos dejaron mi garganta demasiado herida para hablar.
Mientras el sol de invierno entrecierra los ojos ante la flor fantasma
que muere en su raído barro
lejos del hogar,
los hombres me dicen que hable honestamente de mi papel en los hechos:
Está bien, pues sí,
debí haber permanecido adentro
mientras despotricabas en la acera
pero mi corazón confuso se subió al carro.
Es que una vez
pasé demasiado tiempo en el desierto
por lo que la niebla espesa colgada de los árboles me parece glamorosa,
como cuando la sangre se seca sobre la piel,
y yo quiero llevarla puesta
a mi paseo nocturno,
toquetear su ondulado camino resbalando en mi cara
porque: vete a la mierda,
no me encontraste aquí.
Yo te traje.
Landscape with Written Statement
You wrap my ribs in gauze —
an experiment with the word tenderly
after your hands left my throat too bruised to speak.
While winter sun squints at the ghost flower
dying in its shabby terra cotta
far from home
men tell me to be honest about my role in the incident:
Okay, yes
I should have stayed inside
while you railed from the sidewalk
but my confused heart got into the car.
What happened is
I once spent too much time in the desert
so pogonip seems glamorous hung stuck in the trees
like when blood dries on skin
and I want to wear it
out for an evening,
pat my hands over its kinky path down my face
because: fuck you,
you didn’t find me here.
I brought you here.
Paisaje con sexo y violencia
Observa en este retrato el esplendor del valle central
gris como una dosis común de golpes rastreros—su típica
sugerencia para días lluviosos. Yo ahí, aplastada sobre los múltiples
encantos de nuestra topografía.
Aun depravada como era con mi cuerpo
odiaba lavar la sangre de mi pelo.
Sirvo para pocas cosas.
Soy buena para estar sentada. Todo el invierno
pasé sentada a la intemperie en un pueblo con demasiada tierra,
y conté verticilos lentamente
pero proseguí, mi estúpida obsesión, a pesar de
no poder extender mis frases
húmedas a la oscuridad. Traté de detonar mi cuerpo
de modo diferente a él. Pero entonces
llegaron las sirenas y luego vino el papeleo.
Me delatan: colinas de caracoles.
Detrás de mí: cómo se pega la sangre al pelo.
Panorama: Sirvo para pocas cosas.
Landscape with Sex and Violence
Consider this canvas of central valley splendor
dull as the usual set of sucker punches—his distinctive
suggestion for a rainy day. I was crushed over sundry
wonders of our topography.
Depraved though I was about my body
I hated washing blood from my hair.
There is little I am good at.
I am good at sitting. That entire winter
I sat outside in a town with too much earth
and I counted whorls slowly
but I kept on with it, my stupid obsession, even though
I couldn’t splay my sentences
damp into dark. I tried to detonate my body
differently than he did. But then
came the sirens and then came the paperwork.
Betrayed me: Hills of snails.
Behind me: How blood sticks to hair.
Panorama: There is little I am good for.
Paisaje con lechea y doble de riesgo
Frente al callejón que me separa de mí: ahí estoy,
Hollywood alumbra mi vestido decalescente,
que me hace sentir, con solo verlo,
como si alguien sujetara mis caderas contra el piso y me tirara, rostro-a-tierra
pero he visto a mi doble de bufanda seria arrojar
sus llaves contra maleantillos novatos
y agarrar a uno de ellos por la nuca tan duro que lo hizo gritar
“maldita sea, perra” y me dio envidia
porque nunca aprendí a completar ninguna interacción
sin que en algún lugar dentro de mí quedara algo de semen
A la Mujer al otro lado del Callejón:
lo peor de todo era
pretender
que aquello no estaba ocurriendo o talvez en ese momento me convencí a mí misma
de que estaba ocurriéndole a otra
Por vivir en este desierto
no usé bufanda hasta que fui demasiado vieja para arriesgarme
a llevar cualquier cosa alrededor de mi cuello,
y más gustosamente
entraría gimiendo en una horca que llevar una puesta
por moda a pesar de que las larvas se han alimentado de mí en todas las estaciones
porque soy una frondosa
pegajosa planta anual desenrollándose en extraña humedad hacia auto-entierro
o, mejor dicho
hasta que extraiga mi verdadero yo de la bifurcación.
Landscape with Pinweed and Stunt Double
Across the alleyway from myself there I am
lit by Hollywood in a decalescent dress
which feels just by looking at it
that someone’s holding my hips and going at me face down
but I’ve seen my ringer in a stern scarf throw
her keys at would-be punks
and catch one at the back of the head so hard he called up a loud
“goddamn it bitch” and I envied that
as I never really learned how to finish an interaction
without letting semen inside me somewhere.
To the Woman Across the Alleyway:
the worst thing of all
was pretending
it wasn’t happening or maybe in that moment I convinced myself
it was happening to someone else.
Living in this wasteland
I didn’t wear a scarf until I was too old to risk
anything around my neck
and would just as soon
groan into a chokehold than wear it
as fashion though grubs have fed on me in every season
because I’m a lush
tacky annual unwinding in rare humidity toward self-burial
or, I mean
once I pull my true self from the split.
Paisaje agreste ensangrentado
Todos los gatos salen de noche a
comprobar que vivo a la intemperie aunque no esperarás
que arañe por comida mientras casi todos duermen.
Prefiero no comer.
No quiero que nadie me mantenga.
Soy un conjunto de cosas redondas, ridículas.
Hablo disparates en esta tierra
agreste exuberante de veranos
(me voy a dedo en el carro de alguien el carro de alguien
el carro de alguien y ahí vemos si se puede probar
que toda búsqueda de mi cuerpo acaba en tragedia.
Era una mentira, como aquello de hacer arte con la desesperanza)
y me muestras arriba de las rocas y enrollándose en la sangre que he perdido
una columna de humo que no me importa
He llegado a los trece años antes de saber que las hormigas pueden anidar
en un leño, a los catorce antes de saber
que las reproductoras tienen alas.
A la luz de proyectores bailo por mi cena.
Y doquiera que deambulo los gatos arañan mis extremidades.
No puedo quedarme aquí. Se ha terminado todo, nunca fue de otra manera,
nunca iba a ocurrir un milagro
que pudiera mantenerme verde.
Landscape with Blood and Boondocks
All the cats compass out at night to verify
my homelessness though you can’t
expect me to claw for food while most everyone else is sleeping.
I’ll just as soon not eat.
I don’t want anyone to keep me.
I’m a set of round, ridiculous things.
I talk claptrap in this lush
summer land of boondocks
(I thumb into somebody’s car into somebody’s car
into somebody’s car and then we see if we can prove
that every search for my body ends tragically.
It was a lie about forming art from despair)
and you point out plume I don’t care about
over the rocks and ruffled around the blood I’ve lost.
I am thirteen before I know that ants can nest
in a log, fourteen before I know
that the reproductives have wings.
Under stag lights I dance for my dinner.
And everywhere I wander the cats scratch my legs.
I can’t stay here. It’s over, it was always over,
there was never going to be a miracle
that would keep me green.
Paisaje con ron e implosión
Deberías haber visto mis pechos en un vestido tan extravagante
que estaba solitario en medio de una década
de estilo horticultura-eléctrica como aquella
en que todos estos bosquecillos agridulces fueron plantados, y,
¡Por supuesto! Me lo arranqué del cuerpo y lo vendí.
al precio de una botella de ron en la más limpia, más brillante esquina
donde no temí por mi piel por
estar enamorada de una mujer que no me atrae.
Enciendes la televisión y todo lo que escuchas
es la nueva manera de hablar
preguntada y respondida
o la vieja nueva manera de hablar que ahora todos siguen.
¿Me gusta eso? No.
Me adapto a los multi-muchos balcones de California
como a un símbolo de liberación
como la refinada que no soy
ya que al margen de cuántos balaústres
del barandal o de la ciudad visible
logremos ver contra el neón de un motel de mala muerte
no dejo de estar atrapada al interior
de mi fija perspectiva o de lo contrario soy
clima
explotando, como el clima.
Landscape with Rum and Implosion
You should have seen my breasts inside a dress so extravagant
it was rogue among a decade
of the type of electric horticulture
all these bittersweet groves were founded on so
yeah, I traded it right off my body
for a bottle of rum on the cleanest, brightest street corner
I didn’t think to guard my skin against because
I’m in love with a woman who doesn’t appeal to me.
Turn on the television and all you hear
is the new way of speaking
asked and answered
or the old new way of speaking now that everyone’s doing it.
Am I happy about it? No.
I adapt to the manifold balconies of California
as a symbol of liberation
like the sophisticate I’m not
when no matter how many rails
we could finish from the railing
or the viewshed of a whole city against the neon of a floozy motel
I am only ever trapped inside
my own fixed vantage point or else I am
weather
imploding, such as it does.