El español es una lengua de mil caras. En esta entrega presentamos una muestra de poesía paraguaya contemporánea, país en el que el español está en constante lucha con la lengua guaraní. La selección y el prólogo, donde se explica brevemente la pluralidad lingüística en la que estos poetas escriben, corren a cargo del poeta chileno Jaime Retamales. Esta primera parte incluye a Jorge Canese (1947), Giselle Caputo (1986), Christian Kent (1983), Lía Colombino (1974), Cristino Bogado (1967), Camila Recalde (1992) y Edu Barreto (1978).
Poesía paraguaya contemporánea
Por Jaime Retamales
Augusto Roa Bastos dejó dicho que Paraguay es una isla rodeada de tierra. Y de cierto modo, Paraguay aún conserva su carácter insular. De todos los países de América del Sur, Paraguay tiene la historia del país más devastado por guerras y dictaduras, movidas por el poder y los brutos intereses del capital nacional y extranjero. Una historia que adeuda tierras, justicia y libertades públicas. Una tierra de contrastes sociales, de amables gentes y en donde aún se encuentran, contaminándolo todo, los tentáculos de un poder corrupto. Pero no es este contexto, dominado por un partido político de curioso y sustantivo nombre (el Partido Colorado), el único para leer a los poetas paraguayos: existe un asunto de lenguas, es un país bilingüe. El 37% de la población era monolingüe guaraní, el 50% bilingüe (guaraní-castellano), el 7% monolingüe castellano, y el 6% restante hablante de otras lenguas (censo de 1992). La cultura guaraní se caracteriza por tener una alta religiosidad y posee una alta influencia sobre la población paraguaya. Los paraguayos, dicen sus estudiosos e intelectuales, son en extremo conservadores. Mantienen una estructura familiar en la que la figura del hombre, del “padre”, es la preponderante, en la que las mujeres se encuentran relegadas y posean una baja representación en los ámbitos laboral y político, respecto de otros países de la región, lo que es más evidente en ciudades del interior del país.
El guaraní, como lengua, tiene su propia historia. Conserva una tradición y esa tradición oral, en la que el despojamiento la ha convertido en una “tierra errante” ha permeado la lengua de la dominación, la española, la castellana. En palabras de Christian Kent, poeta que ha convocado a los poetas de esta muestra:
“Paraguay es un país bilingüe. Sus idiomas oficiales son el español y el guaraní. Sin embargo, el habla corriente ocurre en el intersticio que se abre entre los idiomas europeo e indígena. A esta forma dialectal -que tampoco es un dialecto, porque tal fenómeno supone una norma espacial, geográfica, asociada a determinada zona- se la conoce como jopara ([yopará]). Este fenómeno lingüístico, que excede los márgenes de la normalización, es el verdadero idioma paraguayo. Su carácter extraoficial es quizás determinante de su forma, en esencia, agramatical; desatenta a toda regla. En algunos casos, determinado casi siempre por el capricho estético del enunciante, se aplica la grafía convencional del guaraní (que es, además, una apropiación del idioma, porque el guaraní es una lengua de tradición oral); y en otros casos se aplica la grafía castellana. E.g. kesu paraguái o queso paraguay (paraguay, en este caso, cumple la función de adjetivo; paraguayo). Es casi impensable verter el jopara en el molde de una estructura gramatical. Su naturaleza es el cambio, la espontaneidad, la anarquía en la que se desenvuelve en el uso concreto. Podría tal vez conformarse un arbitraje que vaya reconociendo las constantes que se desprenden de los movimientos de nuestra lengua y sugiriendo, a partir de tales constantes, un sistema de reglas, o algo parecido a una gramática. Pero tal ejercicio sería mutilante”.
Es en este inevitable contexto político, social, y cultural, que se opone a los derechos de las minorías y las mayorías, donde se inscribe, expresa, y proyecta el azaroso vector creativo: su poesía. Esta muestra asume en su conjunto una concepción parcial de la creación poética más reciente de Paraguay e incorpora, por su importancia fundacional a Jorge Canese, un importante referente autor de los años 70, inevitable para las generaciones actuales.
Esta primera parte de la muestra incluye a los poetas: Jorge Canese (1947), Giselle Caputo (1986), Christian Kent (1983), Lía Colombino (1974), Cristino Bogado (1967), Camila Recalde (1992), y Edu Barreto (1978).
Jorge Canese
(Asunción,1947)
Médico microbiólogo docente universitario escribió un montón de libros sobre todo poesía: paloma blanca paloma negra, kantos del akantilado, alegrías del purgatorio, indios-go-home, la conspiración de los ginecólogos, para mí venenos, temworeì pornografía para niños, etc., que por supuesto no ha leído casi nadie, muy difícil de leer-disfrutar aún para los guarañol hablantes, mezcla de español portugués guaraní paraguayo y muchos caprichismos idióticos idiotópicos idiopáticos. En el año 2011 publicó en arandurä ediciones las palabras k y en 2012 territorio ka, ilegibles e indescifrables multimix de toda su obra anterior. Estuvo preso torturado y exiliado durante el gobierno del tirano Stroessner; sigue creyendo en la poesía aunque poco-muy-poco en la que hoy-por-hoy se inscribe como tal propone al inicio de su tercera edad una porno-post-vanguardia dado que la pornografía parece ser el lenguaje más universal de nuestro tiempo una ultraneovanguardia como única salida espiritual eficaz al pasmo depresivo global contemporáneo: xempri-pafrenxipe’ë-añarakôpeguarè-partida.
bombachita kunu´ü
agachate nena linda
agachate che mamá
a ver si poro-al-descuido ta-ma’ëmi nde tatú
takoari ñamanone
tamanomi che-kambá
bombachita-a-mótare amanoseté
ahechane hakure nde cuarto-ipyguiolado
por siempre-ngo a consentí
vyroreí de las vyrezas
ahëtusé de las cortezas
ykere nde tatu’i
maiteí cheve peteí
la cabecita amoïro
el resto tembo-reí
bombachita kunu´u
koanga añepyrü el baile con ensistencia
anichene la pendencia
che intrumento neraihú
las chifladuras tienen sus cosas
su mate amargo
su tereré lavado
¿erótica häu?
juro que me alzaré en enero
la concha del jabalí rompió el condón rutilante
pobre tipo che-ra’a comentó engelberta
la que siempre anduvo (obviamente)
con la concha abierta
ñane authentical way-lo-life
¿ha mba’e he’ita anga ha’ekuera?
¿ha mbaupei ñandé ñapenata ijehegui?
upeva katu iproblemaité
que escuche el que tiene dientes
y escupa el que perdió la voz
enhorabuena
ñande javivita tranquilopá
taguató-pytanguy portetujape
ymatiempopeguareicha
¿napemandu’ai-pikó lo-mitä kuñá mita’i?
¿ajepa peneakävaí peneakäkurú?
¿ajepa pene indio pene kaigué pene dejado-atyra?
estoy diciendo que los muertos tenemos un idioma
mínimo-minimorum michimi
ñamba’apokena lo-mitä
japensá jakalkulá jafilosofá ha jameditákena
jaleé ha jañe’e
jakonsientisákena ñaneprójimo proletario
ñaneirü kaigué
ñanerapichá imembyvéa imboriahuvéa iñinutilvéa
melodías poco convencionales
aflicción
nada de oficio
y poco condimento: lo que nadie pensó
oid mortales: suena simpático
sin sentido y sin fondo terminan las desgracias
y el circo sacrificial
ñamba’apota katu lo-mitä
ha upeicharö oré roganata
oré rotriunfata
oré roimponeta ore pensamiento
ore sistema
ore autentical-way-of-life
última cena
¡corten carajo!
ketchup moral hipocondría
chau amigos amigotes cantantes merodeadores
nosotros somos lo(s) que somos
somos la trampa y el vaivén
el trampolín después de todo
el cadáver putrefacto que se murió cogiendo
chau morochos mocosos
mulatas del porvenir
angelitos traviesos
y más allá de los cuerpos
un saludito a los curas y a los santos
a las putas y los pretendidos poetas
que os coma el cuco
que os arrulle el huracán
la última etiqueta
este es mi cuerpo y es tu vino
otro saludito último-pahagué a los monos
a las feas y a los maricas de toda laya
porque ellos (con toda seguridad)
no entrarán jamás en el reino de los muertos
idiotas solemnes: son inmortales
a todos vosotros pues: chau-ché
hasta jamás de los jamases
porque aunque procuréis como tarados
no llegaréis a entender ni así de nuestro (maldito) idioma
peikatunte anga chetelefoneáke
terapa emo’i ne-mensaje kontestador automátikope
ikatu uperö (anga che tiempope)
porodevolveta la llamada katueteí
cherenoike
ani peneresarai
terata-pa eiké-katu nderevikuaitépe
peë añaraköpeguaré-partida
poro’u-laya: ¡vairos!
que ni pintados para prometer amores y revueltas que nunca cumpliréis
epytá upepe
¡atrás!
¿ha xe-pió tkk?
tijeras estiletes kompresas
pegamento y pinzas en kantidades industriales
ni pimienta ni axonxolí
tampoco pachienzia
suprimir edukaxión ovligatoria
esperma y óbulos de plástiko
reconstruir a-dios con baratijas xinas
en estado de infatigable hiperkinesia doblar(emos) la eskina de la nada
acelerar(hemos) el bértigo hasta la libiandad más láit más agsoluta
nos meteremos oveliscos en el kulo
porque xíxíxíxí
los hermanos extratrerrestres nos admiran extasiados: ¡qué bestias!
arkángeles ociosos y un vuda panzón
aklaman el estronismo de nuestras santas voludeces
ké más kompañeros
¿pohäro’ysä? ¿kortinas? ¿kulofrío?
para mí: be-benenos.
reencarnación del quixote de la mancha
debo ser breve
no es cuestión de ir a la guerra sin bastimentos y sin armas
suficiente con que uno haga el papel del boludo al que nadie entiende
la santidad y el heroísmo son histerismos suicidas
1er. mandamiento: no hagas ni desees el mal a nadie
2º mandamiento: no hagas ni desees el bien a nadie
colocarse exactamente a 30 grados
con respecto a la persona o ser a ser influenciado
las exageraciones no producen efecto
abstenerse de criar discipulitos-yryvú
que nos limpien el culo o nos laven los piés
naupepe hina la karakú
la tevikuá-asunto jasolucionatava
las almas son chupadas o perdidas
por imperfecciones del sistema
tembiguai pokoví pokarë ha po-pindápartida
los zombies son algo digno de ver
los tavyrón-kolíes y kulíes también
igual que una troupe de petisas culonas
en un barco sin rumbo
¿repareitor?
producido el fenómeno es imposible volver atrás
lamentarse sólo aumenta el divertimento de los voyeures
que en el mundo espiritual son legión
las energías positivas son fáciles de utilizar
pero agradables y alegres como son
son difíciles de distribuir
problemas se presentan con las negativas
que son las más fuertes
retener este tipo de ondas no es recomendable
pero resultan un desperdicio descargadas a tierra
ñembokapú arrugueitor
hay que reescribir casi toda la magia
las cucarachas amarillas
los enanos rabiosos
añambaraká
las furias
el infinito
y la auténtica nada: nandí verá
hidalgo caballero de habla hispana
busca urgente lugar kármico para una reencarnación apresurada
de verdad me siento extraño y hasta extranjero
cumpliendo con semejante papel
amó kysépe
el chamán chapucero soy yo
vaya joda
glosario mínimo
po’ëmas: mezcla de poemas y po’ë (en guaraní): errar equivocarse
xeveguaräitêpe: sólo para mí mismo
eré-eréa: digas lo que digas
kunu’ü: cariñoso/a
ta-ma’ëmi nde tatú: observaré tu concha (órgano genital femenino)
takoari ñamanone tamanomi che-kambá: si debo morir sobre takô (en guaraní: organo genital femenino) y taco (en español: soporte) muero un poquito mi negra
amanoseté: demasiado me quiero morir
ahechane hakure nde cuarto-ipyguiolado: si observara –ardiente- en las adyacencias de tu muslo
vyroreí de las vyrezas: soncera de las sonceras
ahëtusé: quiero oler olfatear
ykere nde tatu’i: al lado de tu conchita
maiteí cheve peteí: gracias en lo que a mí respecta sólo por una vez
la cabecita amoïro el resto tembo-reí: una vez puesta la cabecita el resto es pija (órgano genital masculino) de-balde
koanga añepyrü: ahora empiezo
anichene: por favor no
che intrumento neraihú: mi ‘instrumento’ te ama
häu: extraña salvaje
che-ra’a: (vocativo) mi compinche
concha: vulgarismo rioplatense: órgano genital femenino
ñane authentical way-lo-life: nuestro auténtico estilo de vida
¿ha mba’e he’ita anga ha’ekuera?: ¿qué dirán ellos ahora?
¿ha mbaupei ñandé ñapenata ijehegui?: ¿y para qué nos aflijiremos por ellos?
upeva katu iproblemaité: eso es exclusivamente problema de ellos
ñande javivita tranquilopá: nosotros viviremos tranquilamente
taguató-pytanguy portetujape: al viejo estilo de los halcones rosados
ymatiempopeguareicha: como se estilaba en los tiempos antigüos
¿napemandu’ai-pikó lo-mitä kuñá mita’i?: ¿no os acardáis muchachos mujeres niños?
¿ajepa peneakävaí peneakäkurú?: ¿verdad que andáis mal de la cabeza?
¿ajepa pene indio pene kaigué pene dejado-atyra?: ¿verdad que parecéis indios cansinos abandonados?
michimi: pequeñito
ñamba’apokena lo-mitä: trabajemos si-qué muchachos
japensá jakalkulá jafilosofá ha jameditákena: pensemos calculemos filosofemos y meditemos
jaleé ha jañe’e: leamos y hablemos
jakonsientisákena ñaneprójimo proletario: concienciemos a nuestros prójimos proletarios
ñaneirü kaigué: nuestros compañeros cansados
ñanerapichá imembyvéa imboriahuvéa iñinutilvéa: nuedstros compatriotas que tienen más hijos que son más pobres que son más inútiles
ñamba’apota katu lo-mitä: insisto en que trabajermos muchachos
ha upeicharö oré roganata: de esa forma nosotros ganaremos
oré rotriunfata: triunfaremos
oré roimponeta ore pensamiento: impondremos nuestro pensamiento
ore sistema: nuestro sistema
ore autentical-way-of-life: nuestro auténtico modo de vida (en guaraní oré primera persona del plural excluyente y ñande inclusivo incluyente)
pahagué: último
peikatunte anga chetelefoneáke: si puedes telefonéame
terapa emo’i ne-mensaje kontestador automátikope: o sino deja tu mensaje en el contestador automático
ikatu uperö (anga che tiempope): y si puedo entonces (cuando tenga tiempo)
porodevolveta la llamada katueteí: te devolveré la llamada sin falta
cherenoike: llámame
ani peneresarai: no os olvidéis
terata-pa eiké-katu nderevikuaitépe: caso contrardo entrad decididamente en vuestro culo
peë añaraköpeguaré-partida: vosotros manga de hijos de la concha de la diabla
poro’u-laya: manga de cogedores
epytá upepe: ¡quédate ahí!
¿ha xe-pió tkk?: ¿y yo soy caca?
¿pohäro’ysä?: remedio yuyo
yryvú: cuervo
naupepe hina la karakú: ahí está el meollo de la cosa
la tevikuá-asunto jasolucionatava: el tema del agujero del culo que debemos solucionar
tembiguai pokoví pokarë ha po-pindápartida: esclavos rateritos sinvergüenzas y aprovechadores
los tavyrón-kolíes y kulíes también: los tontos culones y delicados
ñembokapú arrugueitor: explotar/arrugarse
añambaraká: la guitarra del diablo/a
nandí verá: vacío brillante
amó kysépe: ¿en el fondo? cuchillo
Giselle Caputo
( Buenos Aires, 1986).
Vive en Asunción (Paraguay) desde 1991. Licenciada en Letras (Facultad de Filosofía – UNA). Publicó dos poemarios: Batel (Felicita Ñembyense Cartonera, 2008) y 17 (El Guajhú Ediciones, 2016). Participó en antologías colectivas. Integra el equipo editorial de la revista literaria El Guajhú.
El perro nuestro de cada día
Es como si las bolsas de plástico
se hubiesen puesto de moda para los muebles
porque para qué recordar a los muertos
y juntar polvo en la casa
Las telarañas emigran
y las hormigas hacen lo suyo:
se llevan la última miga
de un hogar, dulce hogar
Mamá cocina, barre, y me mira
con la sugerente pupila del plagueo,
y cuando pasea por el jardín
es porque anda buscando nidos vacíos
Pero cuando vuelve el chasquido del portón,
ella sonríe, el perro entra y nos pregunta
si hoy nos sobró un poco
de nuestro absurdo pan de cada día.
(del poemario Batel, Felicita Ñembytense Cartonera, 2008)
Lluvioteca
lo que saben las altas y soberbias puertas del centro
mientras llueve sobre sus carteles matutinos,
lo que saben las paredes,
el eco de las goteras en el interior de los edificios,
la asamblea silenciosa de fantasmas en las esquinas,
o su dispersión de sombras temblorosas
escondiéndose en los negocios,
lo que sabe la lluvia, que acribilla el asfalto,
ahora que le cuento mis secretos
y me resguardo en los escalones de una cafetería
y los olores me llenan de deseos extenuados
hay intuiciones veladas y certezas metafísicas
bajando con rigor inclemente
por canaletas y desagües,
veo esperanzas imposibles
repitiéndose en los charcos,
y presentimientos fatales
circulando apacibles
en el desfile de paraguas multicolores,
en las miradas solubles de los transeúntes,
o en los ojos hipnotizados de los maniquís,
que parecen sospechar un crimen
detrás de las vidrieras
acá hay una biblioteca invisible, me digo,
cuyos tomos se guardan en la musiquita yoga de la lluvia
que es relax de fondo y sin embargo triste.
(de 17, El Guajhú Ediciones, 2016)
VI
La vida ordinaria es un punto fétido
sobre otra realidad maravillosa,
yo quiero ser una palabra que viaja
lo que duran sus letras,
la respiración decisiva del moribundo,
un aliento cosmogónico o apocalíptico,
un rayo que nos salve de la oscuridad
y nos devuelva el día, a las tres de la mañana,
quiero ser la fuerza intempestiva del mar,
su búsqueda obstinada sobre la playa,
el embrujo de un sonido irrepetible,
el canto de un sauce loco en medio de la noche.
Yo quiero nacer y morir en un instante,
pero que sea verdadero
como el fulgor de un incendio
que te aniquile por completo.
(de Generación Picnik, antología bucólica, El Guajhú Ediciones, 2016)
Christian Kent
(Asunción, 1983)
Christian Kent nación en Asunción, Paraguay, en 1983. Cursó la carrera de Licenciatura en Literatura y Lengua Hispánicas en la Universidad de Chile. De regreso en Paraguay, incursionó como actor en las películas nacionales Universo Servilleta (Luis Aguirre, 2010) y La Enamorada (Martín Crespo, 2013). Publica su primer libro de poemas, “Lieutenant”, en el año 2011, con La Calle Pasy 061 Ediciones Digitales, de Santiago de Chile. Obra reeditada por la editorial Felicita Cartonera en Paraguay. Posteriormente publica “El Conde Orloff” (2013), “Arifina” (2014) y una selección de “Cuatro Cuentos” a través de su propia editorial independiente Okára Japu. Colabora en la revista digital de crítica literaria La Calle Passy y en la revista asuncena El Guajhu. Sus poemas fueron incluidos en diversas antologías: “Gramma”, de la Universidad de Salvador, Buenos Aires; “1000 millones” de la Editorial Municipal de Rosario, Argentina; “Poetas por Km2” del Centro Cultural Juan de Salazar, Paraguay; “La Secta de Artistas del Semen. Breve antología de poesía paraguaya actual”, de Cartonerita Niñabonita, Aragón, España. En mayo de este año presentará su nueva obra, un libro de cuentos titulado “El rey del planeta rojo”, con la editorial Arandurá, de Paraguay. Y se encuentra además en el proceso de posproducción de su primer material como cantautor, el álbum “Perros en el cielo”.
Herencia
No pueden los pájaros anidar en el dinero
El hambriento no puede arrancar su fruto
No puede el fatigado descansar en su sombra
Ni el poeta cantar la sutileza de sus flores
El dinero no respira
No comercia con el aire los gases de la vida
No se arraiga
Es hoja en el viento
Cosecha del hambre y de la miseria
Por esto y por otras cosas te dejo este árbol
La guayaba es la madrecita, ñane jarýi
Le dice a las otras plantas:
“¡Vengas pues, aquí podemos crecer!”
Ella es la que habla con la tierra:
“Yo tengo esto y esto otro para vos
para tus hijas”, le dice el fantasma de la tierra.
“Nosotras vamos a cuidarte”, le dice esta otra.
Te enseñará a pararte
en el centro de vos misma.
Te mostrará como cambiar
tus hojas en otoño.
A cantar con voz de pájaros.
Aprenderás de ella la humildad
A dar sombra al que viene a arrancar tu fruto
A dar sombra al que viene a cortar tu tronco
Tu deber será prestarle el oído
Aprender el lenguaje de sus ramas
Cuando seas grande le dirás
a tus hermanos y a tus hijos:
“Ey, vengan, aquí la tierra es linda,
aquí podemos crecer”.
Ñane Jarýi: Nuestra abuela. (Los guaraní creen que cada cosa, cada ser tiene su espíritu protector, su jarýi).
Milagros comunes
El milagro de la flor que asoma de la tierra oscura
El milagro de la estrella que arde en la negrura del espacio
El milagro del niño que crece en la panza de su madre
El milagro del agua que cae del cielo
El milagro de la hoja que viaja en la espalda del viento
Es el milagro de la respiración
Inspirar/Exhalar
Doblemente agradecido
Marinakué nou tein jára
Rikelme non konoce los tapepoi de marinakué
La planta de sus pies non conoce el kunu’u de la tierra pytã
Los dueños de papeles non son dueños de Yvy
Non se despiertan alarmados con el porai del suinda
Non sueñan con los póras que sakudem los alambrados
Non vem ni puta estrella
No escutan el ñe’e de las raíces: los cuentos velhos de mandi’o.
Rikelmito es dueño de la polizía, de los gobiernos, del presidente
Pero non es dueño de la tierra
Yvy nou teim dueño
Yvy es reflexo
Um póra como nos
Es el/la poeta de los ybyrás, de los avatis
del pombero rekaka y del pindo hovy
Non es de rikelmito
Non es un súper
Non tiene kódigo de barra
Tampoco se puede comprar el ysyry
ni la piedra, ni las nubes, ni los bichos de marinakué
Ni se puede comprar con pirapiré
tudu que con pirapiré se perdió
Po guachuete Rikelme duerme en la panza de la tierra
En los intestinos del gusano
Ahora Rikelmito oikua’apáma
(en el sueño tranki de la tumba)
que non se puede comprar la madrecita
que nada sirve tanto papel
Glosario
Tapepoi: camino angosto que se dibuja con los pies de los que caminan.
Kunu’u: caricia, afecto.
Pytã: Rojo/roja.
Yvy: tierra
Porai: canto ritual de los avá guaraní.
Suindá: ave noctívaga.
Póra: Espíritu, fantasma.
Ñe’e: Habla, lenguaje.
Mandi’o: Mandioca, yuca.
Yvyra: árbol
Avati: Maíz
Pombero rekaka: Cucumelo (Psilocybe Cubensis)
Pindó hovy: árbol sagrado de los guaraní.
Ysyry: agua que corre, arroyo.
Pirapiré: dinero (literalmente, piel de pescado)
Po guasu: señor poderoso (literalmente, mano grande)
Oiku’apáma: ahora ya sabe todo.
Lía Colombino
(Asunción, 1974)
Nació en Asunción, 1974. Fue parte del Taller “Al filo de palabra” en Buenos Aires, Argentina. Integra el colectivo Ediciones de la Ura. Coordina un taller de escritura desde el año 2000 y es docente en la Universidad Nacional de Asunción y en la Universidad Columbia del Paraguay. Publicó ensayos y artículos en diferentes medios y los textos: Las cavidades ausentes (2000), Tierra de Secano (2001), Proyecto Auricular (con el músico Javier Palma – 2006) y (lupa) (2009). Participó del V Festival de Poesía de Granada, Nicaragua (2009), de Conrimel, Encuentro de Mujeres Poetas en Santiago de Chile (2010), de la 20 Feria Internacional del Libro de La Habana, Cuba (2011) y de Poetry Parnassus en Londres, Inglaterra (2012). Obtuvo una mención en el Concurso de Ensayos Rafael Barret en 2011.
(De El Costado)
Tengo todo el azar enrollado
Todo termina y luego vuelve
No se atan las puntas de los hilos
Sólo hay una puerta que une y cruza mi memoria
-No queda espacio para escribir lo que recuerda el dedo-
Un golpe preciso en el lugar de la piel
suelta un lazo
el que sostiene la ausencia apoyada en esta pared blanca
El lado tenaz del cuchillo observa
todo sucederá allí
como si se sintieran dedos hurgando el cabello mojado
Será ya siempre la mano sujetando el lado sin quiebre de las cosas
Mudanza I
Recurro otra vez a los pliegues
para saberme
portadora de la voz que me (re) nombra
Alguna clave
de este lado
cae como flecha justa
Todo vuelve y se convierte
Todo es serpiente que cambia su piel
Mudanza II
Resolver el enigma
Cambiar de piel
Ella cae de manera lenta y suave
hacia
la gravedad
Lugar propio
tomo esto y escribo
junto mis ojos
estoy en el país del empeño
no tengo miedo
tengo gritos en mis dedos
usurpados de mí
el viento viene con remos
sobre un río gris
/no tiene sonidos/
sólo pies
un río con pies huecos
prisioneros
estoy en el país del empeño
aquí
rostros
me ven del revés
Cristino Bogado
(Asunción, 1967)
NO-escritor, no-poeta y desentropizador paraguayo, ha editado poesía: Plagio inconsciente de Leopoldo (cartonerita niña bonita, España, 2014), Contra el fútbol y otros nihilpoemas (2013), Ysypó-paraguay-Rembo, (2012, edición online en La calle Passy, Chile), ensayo (Filosofía del pop, scribd), narrativa breve (Punk Desperezamiento , (2007, Lima-Peru) y extensa (Pindó Kuñakaraí, no-vela a editarse en 2015 en Buenos Aires).
No hay una erección full time de la poesía
Todas nuestras mujeres
(tu amante o mi esposa)
son un cruce de divas del cine
un injerto sin arte de la historia de la música
Yiyis pegoteadas directamente de los museos
incluso figuras de la ficción
actualizándose sin pudor
La silueta de Adjani
El culo de la Bardot
Vox Jane Birkin
Vulva Courbet
Lunar María Félix
Titi guasu Sarli
Akarangue puku Ofelia o
Cabellera Mojada Margarita Terekhova
Nariz Nefertiti
Ojos Bette Davis
Ceño Silvia Pinal
Una yiyi es un cosmos precario y sublime
Un detournement de Ducasse
Stirner
los libros leerlos
al modo Schopenhauer o Buda
-de atrás para delante-
¡de la muerte a la vida!
Con la muela en el bolsillo y
Una yiyi en la cabeza
Salgo a pasear la vida breve
He perdido todas las batallas del nomos y aun
Las del mesianismo
Fracasé con las armas del posiditis del usucapión
Y del usufructo
Pero sé la letra y el 6 x 8 de esa prosodia evanescente
Hit marciano
Firmado por el señor Nada
O el Conde Coronado
Único
Con los dedos del amor
El último del primer día de la nada
Llamada eternidad
Es la niebla ke visto y acepto
El mero fragmento de nada dentro de la infinita eternidad
No respeto patrón ni prejuicios
Pues cabalgo mi eternidad robada por el tiempo
Ese tigre despiadado
Adiós trabajo
Amigos
Mediocridad
Estoy en el patíbulo de la eternidad
La cinta de la nichtung me lleva a esa nada
De donde nada vuelve a salir
La única revolution es ver la NADA
Que nos envuelve☺
Que importáis vos y vuestras supersticiones?
Peike pende revikuape!
Con -los dedos sin huellas
Acaricio- la muela en el bolsillo
Y una yiyi fantasma en su encierro de mariposa
En mi cuarto de coleccionista
Salgo a pasear la vida breve
Como un perro musikal o cuadrafónico
LA NUBE ECUATORIANA
O ESCANEAMOS traseros
de libros, amores, diosas
o Soltamos globos
repletos de deseos de perfumes
del humo que sale de esta achkhana
ruidosa donde emborroneo en jopara
L’acméisme fut
déclaré contre-révolutionnaire dès le début des
années 1920, leo y pienso:
llenar el Chaco de akademgorodok de la pereza
es tu realpolitik
mirar el viento sacudiendo sus sábanas
bebiendo la aurora boreal con el indio andino
escribir poemas es apenas
vivir con jívaros
engordamos la vida con huevos de tortuga recalentados
cuando camino mi bastón de madera de guayaba se feminiza
y la trompeta del silencio da siesta me sopla su pytü fresco como el paraíso
para comer ella maorí se dibuja la alegría
y la gula sobre su rostro
porcelana auténtica
para coger se las borra con la esponja
de la calentura
a la noche navegamos lunas y merkabahs en fríos
foxtrot cubanos
desdentado y con TV cable
había preparado el vocabulario de esa lengua hasta la letra P
en Belén de guaicurus
se desaceleró en hamacas de agua
intentó después de un sueño Michaux
domeñar y privatizar el río Tepotí
entre el Paraguay Católico (póstumo)
y el Paraguay Natural (inacabado)
transcurrió su vida vana de escribano
su Paraguay Secreto se perdió
bajo la aplanadora de la horda futbolera
con todo: cantábamos bajo la lluvia de stars
la danza de la ultra violencia diaria
ñandui de los árboles, pai pai guasu, quici miri, tembeyua
cuidan la meditación del Buda avá
el pez guitarra le dedica un solo durante el almuerzo-escritura
mientras Penélope obscura obscura contornea y patrulla su hortus deliciarum
guaas picta, guaas obi, canindes, paracaus encienden sus fata morganas
pero mi canto sigue los senderos que
abren los pacus memoriosos de San Agustín
surcando tanto el resplandor Agatha del Magallánico meridional o la Aurora bohmesina del Paraná aun soy
al galope sobre los caballos de Chauvet
alcanzó a veces la cima del mundo:
el Paleolítico
y la red que envuelve el mundo como
una lona Christo
juega tenis con los miedos y deseos,
nuestras mascotas poraites de siempre
Camila Recalde
(Asunción, 1992)
Escritora, narradora oral, editora y docente. Publicó poemas en la Antología de la Academia Literaria Kavure´i (2010) de la Facultad de Filosofía y en la Antología Generación Piknic (2016), ediciones El Guajhú. Publicó artículos en la revista especializada en poesía y crítica El Tren Rojo (2016). Coordinó el Club de lectura “Literatura Paraguaya de la Dictadura” (2015). Colaboró en la radio online Ondas Ayvu del CCEJS, con entrevistas a escritores contemporáneos en postcast del programa “Deshojando Ondas”(2015-2016). Es editora de la revista independiente de lengua y literatura El Guajhú (2013-2016). Actualmente se encuentra coordinando junto al poeta Carlos Bazzano, el Laboratorio de Creación Literaria (2016).
La madurez es una niña grande
La niña que se dedicaba a descuartizar flores por las tardes, una de esas tardes se preguntó por qué los seres humanos se empeñan en encontrarle sentido a sus acciones, fue la última vez que se sentó a descuartizar flores por las tardes.
Mis bienes
Clausuraron el parque,
pavimentaron el césped.
Ya no tengo más
que lo que guardan
mis bolsillos rotos;
un par de aguacates,
muchos limones,
un gato sin dueña,
demasiados besos…
Y vos,
que vas con los hombros cargados
de acordes mayores,
de peces sin nombre
y al final del día
solo tenés tus manos
tus manos y sus muchas ampollas
y un invierno leve
que no sacia
tu anhelo de frío.
Y nosotros,
que aun sumando
nuestros escasos bienes
no somos más que polvo,
dudas,
buzón sin casa
parque clausurado,
cabellos sin trenzas,
poemas sueltos,
techaga´u,
no sé.
Mis amigos se drogan
Mis amigos se drogan, se drogan mucho, el gobierno les droga; yo me drogo con ellos, ellos me drogan, me droga el gobierno narco, me droga el tiempo que no para, la tristeza a la que no le saco ni una sonrisita, me droga la incesante duda, me droga la sobriedad con sus reglas demasiado estrictas para mí y mis amigos. Me droga la soja transgénica, las campañas electorales, cada uno de los 40 grados de la tarde asuncena, se droga mi hermanito, mi primo, mi papá y hasta mi vieja se droga. La legalidad, la legalidad es otra cosa.
Contrato social
Tiene derecho a una educación formal:
timbre-fila-tomar distancia-himno
buenos días profesora,
bien, gracias y usted profesora
Tiene derecho a guardar polvo en los bolsillos
del uniforme escolar
Tiene derecho, si se porta bien,
a una vida eterna
y, por supuesto
tiene derecho a permanecer callado .
Está prohibido abrazar árboles
en la peatonal de San Lorenzo.
Beber alcohol frente a la iglesia de Areguá.
Prohibido bañarse desnudo en lugares públicos,
prohibido estornudar sin taparse la boca,
prohibido escribir por la pared,
usar bikini en el hospital,
reírse en los entierros,
chuparse los dedos antes de comer,
manejar muy rápido,
manejar muy despacio,
prohibido escribir “prohibido” sin h,
aunque suene igual…
Prohibido comer con la boca abierta,
con las manos sucias,
mascando con chicle,
con los codos sobre la mesa.
Prohibido.
Prohibido comer tierra,
tomar cerveza con vino
tomarse de las manos entre los nenes,
tomar leche antes de sandía
y después de la sandía,
prohibido casi cualquier cosa.
Prohibido lavarse la cabeza mientras menstruas,
alzar a los bebés mientras menstruas,
bañarse en la piscina,
no usar bombacha,
prohibido sentirse bien mientras menstruas.
No, mamá. No estoy enferma,
estoy menstruando
Prohibido decir menstruación en voz alta y muchas, muchas cosas más.
Dice
Que le zumban los oídos,
que le resuenan los tímpanos.
Quizás son sus diablitos susurrándole lujuria
capaz que son sus ángeles cantándole buenas ondas
puede que sean esos bichitos del oído
despabilándose
quitándose el kaigue
destrozando el interior de su ser frágil
es lo que suelen pasar con los seres que viven dentro de otros, su vitalidad es proporcional a la desgracia del anfitrión y uno los ve y no sabe si alegrarse por uno o por los otros.
Nosotros, los espectadores, cegados por ese afán de objetividad, damos, casi siempre, en sentir pena por ambos, por él, por ellos, por todos. Seguimos optamos por sentir pena para poder, paradójicamente, sentirnos mejor,
más humanos,
más sensibles,
con más ángeles en las orejas.
Silencios
¿Me querés?
Silencio
¿Me escuchás?
Silencio
¿Vos me querés?
El tercer silencio fue tajante. Tres silencios fueron demasiado, me alejé inquieta, sollozaban mis ganas de sollozar. Entonces medité sobre mis sentimientos para encontrar su origen, lo hice detenidamente. Había hecho mal la cuenta, no fueron tres silencios. Fue solo uno, el mismo, idénticamente impersonal.
Habrá que aceptar el hecho de que infinidad de preguntas quedarán sin respuestas. O habrá que aprender a escuchar al silencio, de a poco, quizás él aprenda a escucharme para responderme satisfactoriamente cuando le pregunte si me quiere.
A veces yo, siempre vos.
A veces,
cuando noto lo absurdo de la realidad
casi escucho mis ronquidos
Respirar, despertar, respirar…
generalmente no funciona
¿Cuánto más necesitas para dejar de necesitar?
quedate un rato más,
cocinemos algo
Yo,
que duermo con los pies descubiertos
que te extrañé desde siempre.
que me pregunto respuestas
y me respondo preguntas
que muy pronto me quedé sin nada más para dar
¿Y si dormimos juntos?
quédate a dormir,
durmamos juntos
Siempre
que me entregué a la zoofilia
la llamé de otra forma y deseché la moral
las categorías, las barreras.
busqué cosas que no terminé de comprender.
Vos,
que tenés tanto miedo, tanto miedo
que comprendés el miedo y nada más
que no te gustan las trenzas
que te acercás a luz
solo para agrandar tu sombra y sentirte grande, más grande.
¿Y si hablamos de otra cosa?
Está haciendo frío
mejor ponete una gorra.
Edu Barreto
(Asunción,1978)
Diseñador gráfico y docente universitario. Participó de talleres literarios presenciales a cargo de los escritores Victorio Suárez, Lia Colombino y a distancia, con la argentina Laura Yasán (premio Casa de las Américas La Habana 2008). Algunos de sus poemas fueron publicados en Cuando maduran los signos, poemario del Taller Literario de la UNIBE (2008), Poetas por KM2 (2014), Aposíntesis (2015), El Guajhú No. 7 (2016). Su cuento Ramón/Zulema forma parte de Lascivia Textual, antología de cuentos eróticos lanzada por Revista Y (2014). Alimenta irregularmente su blog: contuberniocatartico.blogspot.com con textos que intentan parecerse a poesía, desde 2005. Actualmente viene desarrollando BienCerca, poesía íntima en espacios públicos, proyecto que consiste en leer poesía al oído de la gente en los bancos de plazas asuncenas.
Por las tardes imagina que la espera es una tarántula, que pasea por su vientre.
Me crucé con un chico de ojos distantes
y no le pregunté su nombre…
Fue cerca del Mercado.
Desde ayer voy a comprar
cosas que no necesito:
Una corbata,
diez berenjenas,
anatómicos a rayas
para ver si me lo encuentro.
Pregunté al policía.
al carnicero,
a la vendedora de huevos…
Sólo recibí insultos.
Nadie distingue ojos distantes
si está perdido en el ruido.
Subí a los colectivos
y pregunté si alguien vio
al chico de ojos distantes.
Nadie respondió.
Sólo recibí empujones.
Fue inútil
Ni en el Mercado, ni en los colectivos
nadie ve ojos distantes
en esta ciudad de ciegos miserables.
Accidente
Habló de una mujer
recuerdo,
e invadió mi cama
un sábado,
con la llave del
deseo atrasado.
Una vez, accidente.
La tercera
se reconoce habitante.
Sin excusas,
lo guié por mi cuerpo:
pantanoso territorio de gemidos
Con cada embestida,
las palabras
cambiaron de color.
Fui gato
que gritó
nombre de hombre
en medio de la noche.
Temprano, nos vestimos
para ocupar
el lugar de simples coincidencias.
En la calle,
nuestros cuerpos
fueron ecuaciones no resueltas.
El asfalto fue un dios
que exigió mucho.
Desviado
Hijo bastardo
de madre soltera
y encima puto:
llevo en mi, todos tus monstruos.
Sobre mis espaldas:
el solitario apellido,
saliva de hombres que terminaron
y se vistieron.
El caminar amanerado,
a veces escondido,
a veces exagerado.
Una vida dudosa.
El radical/ el insano/ el resentido…
Así, ¿Santificado será mi nombre?
Inseguro, paranoico
pero nunca el esfínter contraído.
Clamaron masculinidad
y les mostré el culo.
Ejercieron autoridad
y les escupí en la cara.
Pidieron discreción
y les grité: ORGULLO.
(Anal)tómico
Hay que ser distraído
y dejar el anatómico
en la casa del amante.
Gastado signo de orinar territorio…
Hay que ser cínico
y organizar un museo de calzoncillos
como botines del cuerpo a cuerpo:
Rayados, a motas, manchados.
El tuyo ocupa un lugar privilegiado.
Tener tus iniciales bordadas cerca de los testículos
es la más clara señal
de tu insignificancia.
Masaje
¿Pensamos lo vulnerable
que quedamos al dejar el cuerpo
desnudo ante un par de manos?
Nódulos, dolor y contracturas.
Es tu nombre hecho tirón lo que duele.
Tiene la piel morena.
Fuerza en los brazos.
Una respiración pausada.
Huelo jazmines en el aire.
Los muslos vibran ante el roce.
Intento mirar su bulto
pero el peligro aparece.
Pide que de vuelta
como cuando estuviste
en mi espalda.
Ni el sudor se controla.
Me destapa
y mira mi amapola
queriendo llegar al cielo
sin viento.
Es imposible,
e involuntaria la pulsión.
El deseo es una flor
que crece entre toallas,
años luz de tu cuerpo.