Presentamos una muestra poética de Ériq (Rulo) Sáñez (Ciudad de México, 1986). Sáñez es narrador y poeta, obtuvo el Premio Nacional de Cuento Breve Julio Torri en 2014 y el Premio Nacional Punto de Partida en 2010. Es egresado de la Escuela de escritores de la Sociedad General de Escritores de México (SOGEM) y estudió la carrera de Letras hispánicas en la UNAM. Ha dado lecturas y talleres de escritura en diversas partes de la República Mexicana. Textos suyos han aparecido en diarios y revistas de circulación nacional como Este País, El Universal y publicaciones electrónicas como Círculo de Poesía, Nagari Magazine y otras de España, Estados Unidos y Argentina. La Novela Zombi. Ficciones (Conaculta, 2014) es su ópera prima.
TAL VEZ (2011)
Tal vez
No estoy triste
Tal vez iba por la calle
Y me tropecé con la felicidad
La he puesto en la maleta
(Abismo sin retorno
Caja fuerte
De promesas fútiles)
Y me hago a la idea
De que sigue allí
Como una moneda devaluada
A veces creo que es real
Trato de hablarle
Y la interrumpo en su empedrarse aquilatado
Y si la llego a tocar
Me responde con su roca blanda
Con la pedrada muda entre los dientes
De su calvicie y pan amargo
Tal vez
No disolvimos el amor
En una marea de eternidad
(Y las palabras no dejaron de significar
lo que una vez con ojos de agua nos significaron)
Y tal vez estar
Felizmente es esta silla
Reclinable y giratoria
(Mecedora que teme decir su nombre)
Y hay que dormirse los anhelos y dormirse los ideales
Para apreciar los frutos de la negación
(Porque cuando uno es joven
Siempre quedan ciertos frutos
Que con pasiva expectación
Caen para que uno los recoja)
Debe uno estrangularse
Tanta imprudente juventud
Pues la felicidad urde su horario
Con agujas consabidas
Y toma su agua de una fuente
Horadada y altanera
Hay que saber
Que la felicidad te discrimina
Que a la felicidad se le agradece el mal dominio
Sobre el pueblo
Que se calla
(No se le cuestiona
No se le pide más
Es una sola)
Y es que si nos basta la felicidad que nos tocó
Se acabará la nutrición de los inciertos
(Que al fin y al cabo
Nos llovemos a nosotros)
Es lo ideal hacerse el duro
Es lo ideal contarse historias
De morirse hacia los otros
De morirse adentro de ellos
Yo me enredo en telarañas de mí mismo
En duros sueños innombrables
…Pero no
No puedo
(Estar
Triste)
Estar triste es invención de aves maduras
De venerables mártires
De achacosa vanagloria
Estar triste
Cuando la vida
Te está imponiendo ser feliz
Es de un idiota sin perdón.
LANGUIDECIENDO
(Vayamos, pues / … )
Me convertí en fruto
Pero me pudro 5 años cada mes
Y no me muero
Soy el infeliz de siempre
Pero uno más de ellos: la ventana clara
Que los otros necesitan
Cigarros que impactan
Metrallas rendidas en la piel del portafolio
El final de este viaje
Mis cien vísperas
Las bodas de platino encajonadas
Mis hijos y mis nietos que regresan a escupirme
O amordazar lo irremediable de los daños
Con una corbata y bisoñé
Quizá muera muy pronto la rapidez que ustedes gozan
Entre cuerpos sin augurio y sin continuación
En cambio yo los superé teniendo pelos en la oreja
Domino la vanguardia del desastre
Encumbro disciplinas del ardid
Dirijo las carreras aún con callos en el alma
Estoy en la edad en que un asilo
Sería lo mejor y lo más pleno
Y veo a mis contemporáneos como jóvenes vibrantes
Como exploradores de plata
O hermanos que me buscan por interés
Aquellos que no saben lo que es comer papillas
Pues te rompiste la mandíbula al bañarte
Bendición a voces
Larga vida y mi cadera original
Pero tubos en el alma y sangre ajena
Un hospital que no me quiere dejar ir
Lo tengo todo
Tengo el puesto adecuado
Y como ellos
Los que siempre nos parecen más felices
Hoy yo también voy desgarrando la sonrisa
Río de Dios
Ese eufemismo de la nada
Ahora escuchen mis achaques
Que ya llegué a la meta
Los espero aquí sentado
Repasando las mismas fotos
Y anegándome en el tiempo
Ahora soy el que no lo cree conveniente
El que no le ve caso
El que debe ser más práctico
El que ya mató a sus niños
El que ya eligió
El que ya es lo que será
El que si cambiara se derrumbaría
Como árbol solo en una granizada
Mis nuevas son las mismas
Soy quien se sabe el mundo en un azote de periódico
El que da consejos y quisiera dar advertencias
El de las mismas historias…
El que se tiró al sol y fue de piedra
Porque no encontró lo que buscaba
Y es que lo peor que puede pasarte
No es que no se cumplan tus sueños
Sino que se te cumplan todos los sueños de alguien más
Estaba preguntándome si llorarían por mí
Si supieran que no puedo respirar
Y es una vergüenza que no me conozcan en absoluto
Para saber que mi “no poder” es no querer
Se me murió ahogado de nieve
Un veinteañero entre las píldoras
De castigo se me niega la carne
Y trago vómitos de enfermo
Aún me guerrean recuerdos y voces
De tiempos duros que me aguardan
Y que igual que todos los tiempos
Fueron los otros o no han sido
Las piernas me repugnan con el bastón de su costumbre:
Y es que me paro en vano durante el día
Y es que me paro en vano durante las noches
Y es que me paro en vano al despertarme
Sin tener a dónde ir
Y nadie llama
Desde la noche veo a las jóvenes con unos ojos de vidrio
A los otros ancianos con una medalla en plena sien
Y cuando miro a los niños son sólo instantes sin cara
No es mucho lo que pido en estos días
Sólo no me hablen de puertas abiertas
De alas translúcidas bajo la lengua ni de soles
Que se ponen con un grito enamorado
Pido un buenos días vacío para llenarlo con licor
Y que no me falte la visión cada mañana
Pido un poco más de tiempo
Para no gastarlo todo en una fila de la vida
Me pregunto
Cuándo van a sonar esas campanas para mí
Más son tonadas que me esmero en no creer
Ya no se enorgullezcan por unos logros que no entiendo
Tan sólo cierren mis párpados cuando los ojos me delaten.
…
Habría que hacerlo con cuidado.
E N A M O R A N T E S
Los que llegamos al amor un día lo vimos
Inabarcable en el túnel
Del deseo de la mirada
La noche en que insondablemente
Lo dejamos asaltarnos
O diré que antorcha y redes
En que estábamos sin ley
Caminante madrugada
Escaparate de llegar a ser personas
Y mucho después lo descubrimos en suspiro
Mas nuestros huesos eran ya
De un rojo sin salida
Y es que un momento de los calendarios que guardamos sin usar
Porque se llaman días insantos
Él o ella llegó o nosotros le llegamos
Torpemente como se nos cae una manzana
O como hablamos de ese dios
Que apenas hoy prueba que existe
Gustamos esa droga incandescente
Que descarta nuestra vida en el aroma de su piel
Que llegó como la risa enjambre niña y sin dolor
A conquistarnos con plumaje amigo o de locos autismos
Que rondan aleteando una sonrisa sin pared
Llegó en un automóvil o llegó como con ruedas
Llegó porque lo estábamos llamando
Enamorantes que se niegan a la trampa
Con la música del sí y manos pautadas hacia el no
Con el rabillo del kilómetro
Que marca pasos cuestionables
Cuando la piel es hoja nueva y agitada
A su contacto accidental
Y si les digo que el amor
Se clama diez soles al aire
Antes del salto de los héroes
¿Quién se va a identificar?
Cuando uno no era nadie ni su esencia
Un sentido más descubre hace presente la creación
En la inscripción encuadernada y en el pasmo sigiloso
Pero ya estamos aquí
¿A qué mujer temprana convencimos con las anticartas
En dibujos infernales
Al contagiar a su cartero
El día que todos lo esperaron?
Maceración de carbones y un collar de gotas tibias
En la pulpa de esta espina que se nos volvió la ausencia
Somos el brazo y el puño que se yergue amaneciendo
Todas las ramas azules por una estrella tirana
¿Qué día o cuántos días podemos urdirnos
Hasta la llamarada sin salir
Y sin pensar
En una o dos madres de grava y su empedrado represor
Temblando desde lejos
Por nuestras tardes sin soles
Que se recuestan en las frondas que prevén
O no recuerdan?
¿Cuántos jóvenes me entienden?
¿Cuántas blusas ritualizan y recrean de olor y curso
Un mapa de ojos y de labios?
¿Cuántos leen el pliegue terco que reprime al apremiar?
¿El bulto necio que comanda?
¿Cuánto dinero y cuánto blablablá del balbuciendo
Ya invertimos
Ya robamos del monedero al dragón?
Pues cuánta prosa de león o cuánta táctica guerrosa
Va a ceder al punto insomne
Al torpe tino de la mano
Y calculamos el balance entre el sudor
Y lo que vamos a perder
Si el brazo mueve
Como araña de uña lenta
Los centímetros ansiosos
Que olvidaron este mundo
Y orfandad
Y sus esponjas y los fondos y la oscuridad de Dios
Que yace solo
Solo
Solo
Y la lluvia verde que es el pasto y los ladrillos de lo hosco
Y rutinario y el temor la muerte selva
Y lo olvidaron todo porque entre los cuerpos separados no ha nacido la verdad
Pero ya estamos aquí
El que muerde
El baile nuevo
El de las lenguas genitales
El de hablar lo rojo vivo
El de la boca y luego cuello
El de la oreja electrizada
El de las manos deslizando
El que se niega y luego abunda a quien de miles no se cansa
El que acompañará el descenso que se inhala y lame un templo
Digan si lo han conocido
¿Qué ha pasado? No lo entiendo ni me basta la comodidad
Es Mundo
Es Tierra fresca entre mi espada y yo la nombro y la estremezco
Soy su voz y castraré los edificios que se enfrenten contra mí
Yo mataré a todos aquellos que dijeron “están mal”
Cuando nos llegue el Funesto La hora sin trenes El reclamo El frío deber
Y nos separe castigando con su lengua nuestras noches
En pensar y en escribir seremos cuerpos del exilio
Entre los dígitos y el plasma en ese espejo del esclavo
Así las pausas los trayectos
En las casas
Sin nacer
Pero seguimos de otro modo
Heridos no pues sin presencia vida es 0
Y en multitud no hay lumbre alguna y si apareces vida es
Vida es constante germinarnos fruto y años previsibles
De una doble formación
Y darle líquidos de luz al verso largo encabalgado
Porque ya estamos aquí
La ropa justa la silueta a cien mil piedras nos imanta
Y lo sabemos juntamente
Uno bien sabe la presencia y todo el cuerpo es sombra lenta de la sangre
Como yo aquí me descubro
Hablando las palabras que nunca creí que diría
Nuestros cuerpos
Ríos que entroncan
Viga dura de la espera
Se remiten
Se amalgaman
Doble carne que es posible:
Maravilla enamorante
Esas palabras de conquista:
Enamorado
Enamorante
Porque ya estamos aquí
Y aquí seguimos
Tú y yo.