La poeta y dramaturga argentina Eugenia Straccali (La Plata, 1970) ha publicado recientemente Para escuchar la música del poema. Proponemos aquí la lectura de tres textos del libro. Ha publicado también Antígona ningún dios respira sobre el mundo (2006); Electra, ¿es posible matar a un muerto? (2010); Abismadas (2016); Ninfas (no musas) (2017); El alfabeto de los árboles (2018); ¿Por qué no hablan las sirenas? (2019); Atlas de la poesía argentina (2017); Atlas de la poesía argentina II (2019).
LA MÚSICA DEL POEMA
Quien no escribe ni está enamorado
ni se psicoanaliza, está muerto.
(Julia Kristeva)
Para escuchar la música de un poema
hay que abandonarse
se precisa la lejanía
la interrupción del continuo humano
y su cansancio prosaico
ritmo de voces y pájaros
contrasentido del mundo
que nos permite aullar
porque sabemos del terror
que produce estar en la superficie.
Oda al ruiseñor
siento en mi garganta
un lenguaje agitándose
poesía y dolor
estado de vigilia
en la apertura de la noche
cesura de un verso
migra el sonido pardo de sus alas
herida de la lengua
el poema peligra en la escritura
el silencio habita el lenguaje
y al mismo tiempo en sus fronteras.
Qué callado debió estar aquel mar
para el milagro de la palabra.
Desde lo más profundo de la arboleda, un ruiseñor
sacia con su melodía la obscuridad deseada
(P. B. Shelley)
EL DUELO
El ruiseñor alerta que la poesía suena
como diapasón del vientoen los sentidos
beber cicutahundirse en el Leteo:
escribir sobre las aguas del olvido
cuántos nuestros ojos quedaron flotando
gruta que es simiente
amargura sin umbral
la letra se vuelve fugaz en un poema
esperando que la música irrumpa
y se instale en los oídos.
TRAMPA
Vos yo confluimos en el poema
se cortó la red, la trampa,
los peces vuelven desesperados a la corriente
tal vez existimos, atravesamos la realidad,
la imagen
vibramos
nos deseamos
nos destruimos
antes de que puedas darte cuenta
estaré distante
sentada en el dintel del bosque
sin esperarte
guarecida en el poema
en el ritmo natural de los versos
melodía inacabada.