Los cuadernos perdidos de Robert Walser
Vida solitaria
Lejos del camino, encerrado
en esta habitación, leo y releo
el libro de Silesius.
¿Acaso mi alma es límpida
como un cristal?
¿Mi cuerpo nació del barro?
Benévolo lector:
el animal mira un trozo de tierra
y no comprende que en toda forma
habita una plegaria silenciosa.
Yo sólo anhelo llegar a ser
luz que se expande hasta morir.
Cielo dormido
El sol no es un halcón de vidrio.
La luz no cabe en un vaso.
Miren: soy un pequeño guijarro.
Mejor: una mota de polvo.
No: aquella sombra en el río.
Soy aquella sombra
en el fondo del río.
Varias veces estuve a punto de morir
Salgo a caminar y me confundo
entre la tropa de mis personajes.
Todo cambia constantemente.
El sol gira como un trompo en mi cabeza.
Varias veces estuve a punto de morir.
Las cosas son más bellas
vistas desde afuera.
Herisau
Sobre papel de desecho, sobre
el dorso del calendario del año
pasado, me pongo a escribir
-con una letra minúscula-
poemas y relatos.
Traduzco voces, tañidos, palabras
que nadie dijo aún.
Benévolo lector:
puedes quedarte un rato más
mirando mi pobreza.
