Gracias a los buenos oficios del poeta Santiago Márquez iniciamos un acercamiento a la poesía uruguaya contemporánea. En seguida presentamos la poesía de Horacio Cavallo (Montevideo, 1977). Obtuvo el Primer Premio (compartido) en el Concurso Anual de Literatura del Ministerio de Educación y Cultura 2006 con el poemario titulado El revés asombrado de la ocarina.
Creación
Juego al solitario los domingos,
revuelvo cajones, miro el cielo
–otros se suicidan por lo mismo–
canturreo
Vuelvo a estar a solas con el otro,
que se deshilacha en la semana
–ese suicidado de mí mismo–
trae mi cara.
Dejo al inquilino entre cuadernos,
mirándolo hacer, ensimismado
–sobro los domingos en sus cosas–
lo he notado.
De sus garabatos cae la noche,
se pone de pie, desaparece
–no entra en estadísticas el muerto–
oscurece.
Primavera
Hay dos caras,
diametralmente opuestas
en setiembre.
Una que se construye hacia la luz
Donde brota el verdor de la enramada
Otra que la provocan siete vientos
Que empujan a gorriones desplumados
Hacia el cuadrado gris de las veredas
Vale mirar al cielo en primavera
Pero en puntas de pie.
Otoño
Idas las moscas vuelvo al recurrente
sueño en que la hojarasca incontrolable
lejos de las escobas y las quemas
sepulta a la ciudad en su beige(eza)
indignado va el cielo ensangrentando
nubarrones desde marzo hasta junio.
Invierno
Solo la cama guarda la segura
Dulce inmovilidad del paraíso.
El resto de la casa, la ciudad,
Todo es mentira cuando lluvia, viento,
Hacen temblar las manos y las ramas.
Una tonada triste bajo las frazadas.
Eso es lo cierto: duerme, espera, inverna.
Nada para agregar
He venido cambiando domicilio
Y dejando mujeres en posición fetal
Con los ojos perdidos en el cielo
Del que planificaban no soltarse
Yo perdí el corazón entre las manos
Diminutas y abiertas de mi hijo
Y el vientre en los colchones olvidados
Y los brazos en los mostradores
Donde ofrecí monedas por billetes
Y vi pasar el tiempo calle afuera
El trajinar es largo y ya no puedo
Rumiar en solitario mis canciones
He perdido la cosa que sostiene
-pongale ud. El nombre-
Al individuo sobre la superficie
Nada para agregar
Llega la noche
Vienen los alaridos a destiempo
Y está mi hijo sosteniendo un corazón
Inmóvil
Aterrado
La cara de cerdo es de tu padre
La cara de cerdo es de tu padre
La cara de cerdo es de tu padre.
Nada para agregar.
Datos vitales
Horacio Cavallo nació (Montevideo, 1977). Es narrador y poeta. En poesía obtuvo el Primer Premio (compartido) en el Concurso Anual de Literatura del Ministerio de Educación y Cultura, en 2006, con el poemario titulado El revés asombrado de la ocarina. En narrativa obtuvo menciones de honor consecutivas, en 2004 (Maquinaria viva, novela) y 2005 (Doce vueltas alrededor de un plátano, cuentos), en el Concurso Literario Municipal, y el Primer Premio en 2007 con la novela Oso de trapo, editada por Trilce en 2008. El mismo año fue galardonado con una de las 10 becas Luis Cerminara que otorga la Intendencia Municipal de Montevideo a jóvenes creadores. Ha publicado algunos de sus trabajos en la revista Versal (Holanda), El Parnaso (España), Viento en Vela (México) y Punto de partida (México, UNAM). Integra varias antologías tanto en el género narrativa como en poesía. En 2008 fue premiado con los Fondos Concursables junto a Francisco Tomsich por Sonetos a dos (Trilce, 2009), un libro de sonetos escrito a cuatro manos. En 2009 obtiene los Fondos Concursables en la categoría narrativa con la novela Fabril, que será publicada en 2010. Publica también Lo que cae del ciruelo, en coautoría con Germán Borelli, La propia cartonera, 2009. Participó en Festivales literarios en México (El vértigo de los Aires) Brasil (Festlatino) y Venezuela (Encuentro de escritores del ALBA- FILVEN 2008)