La poeta Biancamaria Frabotta (Roma, 1946), nos regala una pequeña selección de sus poemas que han sido publicados en la Antología bilingüe Caminos del agua, poetas italianos del segundo Novecientos (traducción de Erika Reginato, Monte Ávila Editores Latinoamericana, Venezuela, 2008). La elección de sus poemas en esta Antología ha sido producto de una investigación y lectura de la poesía del viejo continente. Enmarca su gran trayectoria como poeta, ensayista y profesora universitaria que con gran conciencia inicia su recorrido poético desde la plaquette italiana Affeminata (Afeminada) de 1976:
Biancamaria Frabotta: La poesía llega cuando quiere, te llama…
Texto y traducciones de Erika Reginato
La poeta Biancamaria Frabotta (Roma, 1946), nos regala una pequeña selección de sus poemas que han sido publicados en la Antología bilingüe Caminos del agua, poetas italianos del segundo Novecientos (traducción de Erika Reginato, Monte Ávila Editores Latinoamericana, Venezuela, 2008). La elección de sus poemas en esta Antología ha sido producto de una investigación y lectura de la poesía del viejo continente. Enmarca su gran trayectoria como poeta, ensayista y profesora universitaria que con gran conciencia inicia su recorrido poético desde la plaquette italiana Affeminata (Afeminada) de 1976:
Si tú estás aun despierto, / escríbeme, te lo ruego, un poema/ que le gane a la vida que se obstina/ que me aferre al alba/ a un inicio de no vida. / Un poema sea que no se me cierre encima como una/ pinza…
De esta manera escribía la poeta Biancamaria Frabotta el poema que se encuentra en su primer libro: Il rumore bianco (El rumor blanco, 1982), una poeta que defiende la poesía escrita por el género femenino pero también lo universaliza en el lenguaje poético. Escribe en italiano: « Io sono poetessa e intera non appartengo a nessuno », dice: “soy una poeta entera y no le pertenezco a nadie”, insistiendo en la unidad e la poesía, la originalidad de cada verso y la autoría del poema.
En los poemas de Biancamaria Frabotta el paso del tiempo no es trivial ya que renueva la condición de la palabra poética, la relación literaria entre autora-autoría-autoridad. Explora el porvenir de los objetos en una realidad solitaria y silenciosa como las herramientas que construyen el arca de la vida: Tú no sabes lo que dices, alma mía/ que ardes en una caja de arena./ Y no obstante hablas, y haces/ como el sugerente turbulento/ que es reservado con las quintas/ y recita claro su parte.
En el libro “La planta del pan” (2003), se dedican unos versos a la sabiduría del instinto humano, ya que hay un epígrafe en el poema “La avara sirena” exaltando la grandeza de Moby Dick que dice: …y el avaro Tritón, la Sabiduría, mostraba los tesoros que había acumulado. La supervivencias es la meta y la memoria: Sí, es ella a quien vuelvo a ver/ la aglomeración de Sabiduría/ la avara, intraducible Sirena… / ¿qué desfiladero abre/ en su mente rebosante/ el mal impronunciable? (…)
Y en otro poema, siempre detenida en la vigilia, escribe: Como un portero de noche/ como un centinela inclinada/ sobre el rehén, a cada/ respiración suya se sobresalta, cuidando/ sobre el filo de la espada (…). Este es el incansable recorrido de una búsqueda de la poesía que parte del desenlace del amor como parte de la vida hasta donde la voluntad y la emoción se transforman en la percepción del tiempo presente.
Agrega en sus entrevistas este comentario: La poesía llega cuando quiere, te llama…lo importante es responder.
del libro La planta de pan, 2003
Inexorable factor
tú que nunca dices el negro
monosílabo del yo
es mi planta de pan
este frívolo idioma
de noches ajetreadas
que se cuentan, que envuelven.
Esta pálida
vulnerable semilla
que echa raíces dentro de nosotros
y de nosotros se nutre,
esta alegre
grama infecciosa.
*
Inesorabile fattore
tu che mai dici il nero
monosillabo dell’io
è la mia pianta del pane
questo futile idioma
di notti indaffarate
a contarsi, a coprirsi.
Questo pallido
vulnerabile seme
che ci alligna dentro
e di noi si nutre,
questa infestante
gramigna festosa.
***
A veces, si uno duerme
el otro, medio desvelado vigila.
Fiel al turno y extenuado
no cede en el ignoto sagrario.
Como un portero de noche
como un centinela inclinado
sobre el rehén, que en cada
de su respiración se sobresalta, cuidando
sobre el filo de la espada
que no lo conduzca a la injuria
tanto arrastrarse
en el precario esplendor
de la hierba tranquilizante.
*
Talvolta, se uno dorme
l’altra, in semiveglia vigila.
Fedele al turno e stremata
al ignoto sacrario non cede.
Come un portiere di notte
come una sentinella chinata
sull’ostaggio, ad ogni suo
respiro sussulta, badando
sul filo della spada
che non gli rechi oltraggio
tanto trascinarsi
nel precario splendore
dell’erba tranquillante.
***
Los signos del cielo
(Georg. I,487-8)
I
Era ella la arbórea reina
el gigante de la fiesta
su atenuado tambor.
Gran planta inconciliable
radicada detrás
de una áspera cordillera
consejera de la media luna
de cualquier mayo feliz
en sus improvisados refugios
creciendo al par de los otros
en el general murmullo
de sus larvas apenas entonadas.
Dicen que después de cincuenta años
en medio de las pequeñas hojas encrestadas
se anudarán sus primeras bellotas.
*
I segni del cielo
(Geor.,I,487-8)
I
Era lei, l’arbore regina
il gigante della festa
il suo attutito tamburo.
Grande, inconciliata pianta
radicata come sul dorso
di un’aspra cordigliera
consigliera della mezzaluna
di un qualche maggio felice
nei suoi improvvisati ripari
al pari d’altri crescendo
nel generale mormorio
delle sue larve appena intonate.
Dicono che solo dopo cinquant’anni
in mezo alle piccole foglie crestate
si annoderanno le sue prime ghiande.
II
Si todo transcurre a nuestras espaldas
y en la ciudad son extraños los signos del cielo
quién los recogerá allá abajo
donde los rayos persiguen
los dóciles grumos mondados aún crudos
y medio vacíos, las ramas
del verde aniquilado, el tronco
obligado a arrodillarse
como quien recibe un disparo en la nuca.
¿Quién nutrirá entre sus nidos adheridos
la fuerza viva de la abubilla sedentaria
y el concertador vuelo de las garzas
si todo a nuestras espaldas cae?
*
II
Se tutto alle nostre spalle accade
e rari in città sono i segni del cielo
chi li raccoglierà la giù
dove i fulmini si inseguono
i miti cespi mondati ancora crudi
e vuoti al mezzo, i rami
del verde annichilato, il tronco
costretto in ginocchio
come uno sparato alla nuca.
Chi nutrirà tra i suoi nidi anneriti
la forza viva dell’upupa stanziale
o il concertato volo delle gazze
se tutto alle nostre spalle cade?
**
de Manos Mortales (2012)
Es la temporada de los largos días
el flash registra aún a cada rato
sobre la fisonomía desenfocada de las cosas.
Algunos piensan en aquella infundada
luz en la luz, más débil
e inaccesible, como el uno y el otro
entre los brazos del amante, cuando
las poses esfumadas en las cuales se ríe
se hace corta la respiración y entre los pájaros
de las alas de oro se esparce la voz
de los que muchos saltaran en la misma rama.
E’ la stagione dei giorni lunghi
eppure il flash scatta ogni volta
sulla fisionomia sfocata delle cose.
Ad alcuni pare infondata quella
luce nella luce, più debole
e inaccessibile, come l’uno all’altra
fra le braccia dell’amante, quando
sfumano le pose in cui si ride
si fa corto il respiro e fra i gruccioni
dalle ali d’oro si sparge la voce
che in troppi saltellano sullo stesso ramo.
Datos vitales
Biancamaria Frabotta (Roma, 1946). Profesora de Literatura Italiana Moderna en la Universidad “La Sapienza” de Roma. Ha publicado obras narrativa, teatrales, ensayísticas y los siguientes libros de poesía: Il rumore bianco (El rumor blanco, 1982), Appunti di volo e altre poesie (Apuntes de vuelo y otras poesías, 1985), Controcanto al chiuso, (Contracanto encerrado, 1991), La viandanza (1995), la selección: High tide (Poetry Ireland LTD, Dublín, 1998), Terra contigua (Tierra contigua, 1999). Entre sus ensayos en italiano se encuentran La lectura al femenino (1980), Giorgio Caproni, el poeta del desencanto (1993), La planta del pan (La pianta del pane, 2003). Ha sido correctora de los volúmenes italianos Archipiélago melancolía y de la selección en la Antología: Poetas de la melancolía (2001) y de otras antologías de poetas italianos como son: Gli eterni lavori (Los eternos trabajos, 2005), I nuovi climi ( Los nuevos climas, 2007). Autora de los poemas de: Mani mortali (Manos mortales, 2012) y del ensayo L’estrema volontà. (La extrema voluntad, Estudio sobre Caproni, Fortini, Scialoja, 2010).