De las más recientes promociones de la poesía ecuatoriana, un atisbo a la poesía de Rocío Soria (Quito, 1979). Soria publicó Huella conceptual, libro con el que obtuvo el II Premio en el Concurso de Poesía, Universidad Central del Ecuador, 2003.
Isadora
Isadora
dolor irrespirable,
lento.
Traqueteo de piecitas rotas,
tintineo.
Isadora
la douce Rita.
1
Isadora bellamorte,
hay un dejo de angustia en las partidas,
como un ojo de agua en mi boca por donde se vierten los adioses,
ojo de miedo atávico abierto en la cara como un bostezo.
miedo connatural,
parco,
mimetizado.
Tango bohemio de arrabal.
Isadora bellamorte,
las frutas bajo la tierra enmudecen,
sus hilos,
sus decúbitos,
sus úlceras,
sus azucenas,
sus trances casuales,
sus gestos al filo del ángelus.
Isadora bellamorte,
tu vientre templo sepulcro de los dioses.
Isadora bellamorte,
el recuerdo es el vicio de los solos,
la hora suprema del estertor no es suficiente
también están los recuerdos
sus magras presencias sobre los objetos,
sus músicas revoloteando en los cajones.
polvillo impalpable,
mano inasible,
aguja errante en el quicio del cuerpo.
2
Isadora bambolabella,
las pequeñas manos de Isadora improvisaban juegos
el índice, príncipe dantesco
el pulgar, poeta bufón.
En cada mano de Isadora existía un mundo transpuesto
un nudo,
una fantasía,
un gorjeo de sangre,
una escisión,
un ventrílocuo de agua
¿Isadora existía en un mundo transpuesto?
Isadora muñeca de personalidades múltiples,
las pequeñas manos de Isadora
fábula escénica delicada y breve,
sidra fría,
carne de manzana impúdica sobre la loseta.
3
Isadora mio cuore,
Isadora los trozos de la muerte,
Isadora secreteaba cada noche con los sobrevivientes de la locura
con la degradación del amor,
con los suicidios y otras aves
se masturbaba en su presencia,
atesoraba una sonrisa bajo el puñal del olvido.
Esa noche Isadora se acurrucó junto a los dioses
como si la noche fuera una rata ciega,
y se reconociera en los vestigios que deja el silencio,
en algún sitio de su cabeza dejó de sonar alguna palabra
y la contrarréplica se hizo de su propia sangre.
Isadora bajó las escaleras con su inocencia de niña
trayendo entre sus brazos algunas criaturas del desvelo.
Nuestros hijos nonatos.
Isadora vuelve al círculo,
la muerte no es una sola, hay muchas muertes:
las grandes,
las inmensas,
las azulinas,
pero todas son insignificancias ante el dolor de vivir.
Isadora la sangre en el filo del lienzo,
el agua al borde de la asfixia.
Isadora voz de niña solitaria,
sus desmadejados miembros sobre la camilla
como si ya no fueran suyos.
Su voz se ha roto por dentro
preludio de pequeños espejos,
cubierta de su propia desnudez
Diosa de locos.
Mi corazón es un fardo de huesos rotos,
de flores rotas,
de mariposas esquiladas.
4
Isadora réquiem de Mozart,
Isadora se pasea por mi cuerpo,
se ha quitado los ojos con la espátula de los óleos,
no quiere verme más ha dicho.
Isadora vuelve a nacer como vuelve a morir cuando la sueño,
me quitaré los ojos con la espátula de los óleos.
Isadora danza macabra de Saint-Saëns
su voz de violín profundo y taciturno ha venido por sus cosas,
su voz de violín breve y atribulado
desfila por los huecos del apartamento.
Isadora
lo confieso con angustia pero sin culpa,
el día de su sepelio la busqué en otro cuerpo,
sucede como con los fantasmas vivientes de las cosas perdidas
en el fondo de los cajones del recuerdo
-por qué no habría de llorarla de ese modo,
con el alma,
con el cuerpo,
con la libídine sangrante,
tantearla con mi ciego sexo como si la invocara-
Datos vitales
Rocío Soria R. (Quito, 1979) realizó estudios de pre y postgrado en varias universidades del Ecuador. Ha publicado Huella Conceptual, libro con el que obtuvo el II Premio en el Concurso de Poesía, Universidad Central del Ecuador, 2003; El Cuerpo del hijo, 2008; e Isadora, 2009. Algunos de los reconocimientos que ha obtenido son: I Premio en el Concurso Interuniversitario de Relato Corto, Universidad San Francisco de Quito, 2005; I Primer Premio en el Concurso del Libro y de la Rosa, UNESCO – Pontificia Universidad Católica del Ecuador, 2006. Parte de su poesía ha sido recogida en antologías nacionales e internacionales, ha sido traducida al inglés e invitada a encuentros dentro y fuera del país.