Un epigrama de Quevedo dedicado a Góngora
Presentamos un epigrama de Quevedo, traductor de Marcial y amante de la antología griega, dulcemente dedicado a su acérrimo rival, don Luis de Góngora. El odio de Quevedo alcanzó los más altos niveles al comprar la casa donde vivía Góngora para poderlo echar. A los pocos meses de consumada esa acción, Góngora muere, enfermo, en Córdoba.