Presentamos, en versión de René Higuera, en el marco de la serie Patente de corso de traducción, algunos textos del poeta francés Eugène Guillevic (1907-1997). Recibió el Gran premio de poesía de la Academia Francesa en 1976. En 1984, el Gran premio nacional de poesía. Su primer libro es Requiem (1938) y el último Possibles futurs, 1996.
Eugène Guillevic nació en Carnac, un pueblo del Morbihan, en Bretaña, el 5 de agosto de 1907. Su primer libro, Requiem, aparece hasta 1938.Terraque, se publica en 1942. Proses ou boire dans le secret des grottes compila su producción entre 1935 y 1943. En 1947 publica Exécutoire, que fue inmediatamente editado por Gallimard. Dos años después apareció Gagner. A partir de la segunda mitad del siglo pasado su producción se vuelve más intensa. Terre à bonheur es de 1952; Trente et un sonnets, de 1954. En 1961, se publican; Carnac, Sphère y Rond. Otros de sus títulos son: Euclidiennes, 1967. Ville, 1969; Encoches, de 1970; Paroi, 1971; Inclus, 1973; Du domaine, 1977; Etier, 1979; Autres, 1980; Trouées, 1981; Requis, 1983. Art Poétique, 1989; Le Chant, 1990;Maintenant, 1993; Nature épousée, 1993; Possibles futurs, 1996. Recibió el Gran premio de poesía de la Academia Francesa en 1976. En 1984, el Gran premio nacional de poesía. Murió en marzo de 1997
Bien quisieras
avanzar en tu poema
como un arroyo
Rápido, sinuoso
y tiemblas de devenir
como un estanque
donde podrías, estancado,
ya no reconocerte.
Tu voudrais bien
Avancer dans ton poème
Comme un ruisseau
Sinueux rapide
Et tu trembles de devenir
Comme un étang
Où tu pourrais, stagnant,
Ne plus t’y reconnaître
Batir
Sin ala, sin pájaro, sin viento, pero de noche
Nada más que el batir de una ausencia de ruido
Battement
Pas d’aile, pas d’oiseau, pas de vent, mais la nuit,
Rien que le battement d’une absence de bruit
El arroyo fluye
en la tierra fresca
Él sabe
cómo son duras las piedras
él conoce el sabor
de la tierra
Le ruisseau coule
Dans la terre fraîche.
Il sait
Comme les pierres sont dures.
Il connaît le goût
De la terre.
Las palabras
Participan
de todo lo otro,
las palabras,
Secretadas, masticadas
por los millones de ancestros
Que han todos confiado:
la esperanza, la cólera, los sueños, las revueltas,
Que los han habitado
como las portadas largamente vestimentas
como las camas
Les mots
Ils font partie
de tout l’autre,
les mots,
sécrétés, mâchonnés
par les millions d’ancêtres
qui leur ont tout confié :
espoirs, colères, rêves, révoltes,
qui les ont habités
comme des vêtements longtemps portés,
comme des lits.
El árbol
Afuera está el árbol y es bueno que esté allá
Signo constante de las cosas que se hunden en el lodo
Es verde, es grande, tiene armas poderosas
Sus hojas como las manos de un niño dormido
Se mueven y parpadean
L’arbre
Au-dehors l’arbre est là et c’est bon qu’il soit là,
Signe constant des choses qui plongent dans l’argile.
Il est vert, il est grand, il a des bras puissants.
Ses feuilles comme des mains d’enfant qui dort
S’émeuvent et clignent.
Receta
Tome un tejado de viejas baldosas
Poco antes del mediodía.
Póngalo todo a un lado
De un tilo ya mayor
agitado por el viento.
Coloque sobre ellos
Un cielo azul, lavado
Por las blancas nubes.
Déjelos hacer.
Obsérvelos.
Recette
Prenez un toit de vieilles tuiles
un peu avant midi.
Placez tout à côté
un tilleul déjà grand
remué par le vent.
Mettez au-dessus d’eux
un ciel de bleu, lavé
par des nuages blancs.
Laissez-les faire.
Regardez-les.