Vicente Gallego (Valencia, 1963) publicó recientemente en la colección Palabra de Honor de Visor el libro A pájaros y migas, un libro que se escribe desde hace treinta años.Para Juan Marqués, “la poesía de Gallego es pura celebración, gratitud limpia”. Gallego recibió distinciones como el Premio Ciudad de Melilla, el Premio Loewe, el Premio Nacional de la Crítica, en 2002 y Premio Generación del 27.
MANTELERÍAS
Platos sucios, cristal
que nos sirvió agua fresca,
una fuente de barro
con la fruta lavada.
Hemos comido juntos,
queda vino en las copas,
la tarde nos elige.
Deja puesto el mantel,
que de ajuar en ajuar
viste hoy esta mesa.
Unos granos de arroz,
unas gotas de aceite
lo están haciendo suyo,
ha quedado pintado.
Ciruelas, no os acusen
de arruinar este lienzo,
besáis como ninguna.
Café, mantelerías
de hilo blanco, decidnos
desde cuándo sois novios.
VERANO
Echando ese pellizco
de canela y limón
en leche fría
se declaró el verano.
Lo suyo era asomarse
a cada sobremesa
para llevarnos lejos
donde una cucharilla
tintinea en un vaso.
Andaba por la casa
desnudo con nosotros
prestándonos sus lentes
de aumento y de colores
preguntándose cómo
fue lo nuestro posible.
Pudimos ver así
la frescura del agua
que bebíamos
nos pareció más rubia
la cerveza más rojos
los labios al morderlos
color ya de morir
a media tarde
esas horas del cuarto
tuyo y mío
entre las finas sábanas.