Presentamos algunos textos de la poeta, narradora y traductora Kyra Galván (México, 1956). En 1980 obtuvo el Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino y entre su obra poética destacan Un pequeño moretón en la piel de nadie (1982, 2006), Alabanza escribo (1989), Netzahualcóyotl recorre las islas (1997) e Incandescente (2010).
CONTRADICCIONES IDEOLÓGICAS
AL LAVAR UN PLATO
Entre el Yin y el Yang
¿cuántos eones?
JULIO CORTÁZAR
Contradicciones ideológicas al lavar un plato. ¿No?
Y también quisiera explicar
por qué me maquillo y por qué uso perfume.
Por qué quiero cantar la belleza del cuerpo masculino.
Quiero aclararme bien ese racismo que existe
entre los hombres y las mujeres.
Aclararme por qué cuando lavo un plato
o coso un botón
él no ha de estar haciendo lo mismo.
Me pinto el ojo
no por automatismo imbécil
sino porque es el único instante en el día
en que regreso a tiempos ajenos y
mi mano se vuelve egipcia y
el rasgo del ojo, se me queda en la Historia.
La sombra en el párpado me embalsama eternamente
como mujer.
Es el rito ancestral del payaso:
mejillas rojas y boca de color.
Me pinto porque así me dignifico como bufón.
Estoy repitiendo/ continuando un acto primitivo.
Es como pintar búfalos en la roca.
Y ya no hay cuevas ni búfalos
pero tengo un cuerpo para texturizarlo a mi gusto.
Uso perfume no porque lo anuncie
Catherine Deneuve o lo use la Bardot
sino porque padezco la enfermedad
del siglo XX, la compulsión de la posesión.
Creer que en una botella puede reposar
toda la magia del cosmos,
que me voy a quitar de encima
el olor de la herencia,
la gravedad de la crisis capitalista,
porque a pesar de todo/hembra.
Se dice que las mujeres débiles/que los hombres fuertes.
Sí y nuestras razas tan distintas.
Nuestros sexos tan diversamente complementarios.
Yin & Yang.
La otra parte es el misterio que nunca desnudaremos.
Nunca podré saber —y lo quisiera—
qué se siente estar enfundada en un cuerpo masculino
y ellos no sabrán lo que es olerse a mujer
tener cólicos y jaquecas y
todas esas prendas que solemos usar.
Dos universos físicos en dialéctica constante
con la nostalgia de una unión duradera
donde la fusión de los dos desconocidos
llegue a la profundidad del entendimiento.
Hay una necesidad compulsiva
de dar razones para la escisión
para agudizar racismos con sonrisas
Y las amigas y los amigos
ellos comprenderán
Ellos entienden la distancia que te separa
del amigo/ amado/ enemigo/ desconocido.
Que la reconciliación es un esfuerzo máximo.
La unión, la sublimación
de nuestros propios misterios.
Que el lavar un plato
significa a veces afirmar
las contradicciones de clase
entre el hombre y la mujer.
ANTE LA TUMBA DE DYLAN THOMAS
BUSCAMOS la famosa cruz blanca, de madera.
Sencilla, no sabemos, si por tu propia voluntad
o porque todo el mundo cree
que los poetas somos seres sencillos y humildes por naturaleza,
pero no estaba.
La habían quitado para poder enterrar a tu esposa,
que te sobrevivió más de cuarenta años,
no sabemos si lamentándose o feliz de la vida,
pero quien finalmente te alcanza en el mundo radiante
de los huesos blanquísimos.
Una vez más podrán hacer el amor.
Ojalá de verdad, de muertos, no cuente la edad
porque tú le llevas ventaja a la pobre, cabrón.
Y aquí, a los pies de tu sepulcro o de vuestro sepulcro,
miro las verdes colinas de Gales, tu paisaje siemprevivo
y me pregunto cómo llegaste a ser tan buen poeta,
tan alejado del mundo, pero tan cercano al mar.
Quizá eso fue lo único que te hizo entender
las profundidades de la naturaleza humana,
eso, o el observar el vuelo de las aves marinas.
Y quiero decirte que estuve en tu casa y lloré.
Lloré porque sabía que un día estaría en Laugharne.
No sabía que sería finales de agosto ni que llevaría
a mis hijas ni que andaría de la greña con Arturo,
pero lloré porque tu voz de poeta siempre ha llegado
a mi alma, aunque algunos digan que eras un borracho,
que lo eras, por supuesto,
pero eso nunca te quitó lo poeta.
Yo he venido a rendirte homenaje
pero en este momento, sólo quiero hablarte de miserias.
De cómo el amor se hunde en los órganos
y los hace sangrar, porque nosotros no queremos dejar
de amar o quizá simplemente, de estar.
Y los idilios más apasionados se ensucian
con las palabras ligeras del insulto
y el matrimonio y la convivencia,
provocan silencios lisos que se prolongan
entre los pensamientos largos y los cortos,
y parecen durar toda la vida.
Yo que nací siendo visible
y me he pasado la vida tratando de ser invisible,
empantanada entre el ser y el no ser,
queriendo ser buena madre y lastimando,
deseando amar a los que se me mueren,
dando a destiempo con la torpeza de un reloj descompuesto.
Nadie está exento del dolor en ninguna situación, Dylan,
ni de la culpa que no sirve para nada,
sino para hacernos más lentos, más torpes.
Yo he venido a tu tumba a decir una oración para ti,
pero en este momento no puedo, las lágrimas me ahogan
y sólo quiero que me regales un poco de magia
antes de que la escarcha pinte mi pelo con sus dedos blancos
y mis octubres todos, sean de un hielo definitivo,
antes, comparte conmigo tu secreto.
¿Fue sólo el mar helado y el canto de los cuervos?
¿O las colinas verdes o el frío de la vejez que se acercaba?
Imbuye en mí, tu sangre. Háblame, Dylan, háblame.
NETZAHUALCÓYOTL RECORRE LAS ISLAS
ESTE es un poema que escribo de la mano del sueño.
Where the realm of dream and vigilia touches.
Vean al gran Netzahualcóyotl – texcocano ilustre-
levantarse de su tumba y tomar un avión
en el aeropuerto Benito Juárez a 2 300 m sobre el n. del mar
porque quiere conocer E U R O P A.
¿Cuántos no lo han hecho antes?
Vengan, oh grandes señores, veánlo arrastrar su asombro
y desolación por todo Heathrow.
¡Imagínense! Pasa inadvertido
entre jeques, sultanes y embajadores africanos.
Ya en mi cerebro se confunden las dos lenguas.
Me resistoooo, supongo.
Como cansinamente me he resistido a todo en esta vida.
Sin pensarlo, ya estás en el territorio
de los pelo amarillo.
Mide tus pasos.
Escoge tus palabras.
Eres un extraño más en la tierra del live and let live.
Tu alma peligra de morir en soledad
pues el ronco sonido de los tambores ceremoniales,
el teponaxtle, el padre de padres,
se silenciará al tocar esta tierra neblinosa, misty,
donde la gente rarely sings.
Atrás quedaron tus pirámides de estuco coloreado,
las plumas de quetzal, el revoloteo del chupamirto.
Miren, oh, grandes sabios, el jade que se hizo añicos
y la hoja de obsidiana que atraviesa el corazón.
Nunca más habrá lugar para nosotros.
Perdimos un mundo con todo y su cosmogonía
y nunca pudimos alcanzar otro.
Hablamos una lengua que nos prestaron.
Miren la vergüenza de los vencidos.
Cuantos siglos hemos cargado la culpa
de los conquistados, de los piel oscura.
Hay algo que no logramos alcanzar.
Tú, Netzahualcóyotl, fuiste rey antes
de que vinieran a conquistarnos,
déjame decirte que aún permanece
una armadura que nos asfixia,
un corcel que nos pisotea,
un mastín que nos cercena.
Por supuesto que los ojos-azules nos mirarán por encima.
Así han sido educados.
And we, us, shrinking, until no thing will be left at all.
Miren y escuchen, oh diosas y dioses,
la historia de este noble Netza
que llega con su atavío de noble y sin guaruras
al Hotel Claridges, nada de suite, hay recorte
y lo recibirá un portero portugués o colombiano,.
qué indumentaria tan extrava, hijo, con una piel de leopardo y esas plumas,
cualquiera diría que se coló Moctezuma.
-Aquí, en el Museum of Mankind, en Burlington Gardens,
hay unas piezas del tesoro que mandó Cortés a Europa,
es primera vez, ¿verdad?
Le recomiendo Leicester Square, el shawarma,
¿tiene boletos para el teatro? La más difícil es Miss Saigón.
El cambio de guardia es a las 11:00, pero no espere ver a la reina.
Pero Netza ha oído de la ópera y se lanza a Covent Garden,
pregunta a los del Gothic Look,
pero ésos están ahí por otra rola.
En Picadilly por supuesto, se confunde con los Punks,
pelo morado, rojo, pelo de piñata de 5 puntas.
En Tower Records descubre los discos y el rock.
Está en el país del rock, entra y le aplauden,
se ha ganado el premio a la mejor vestimenta;
desde mañana dejan las chamarras de cuero negro
y las botitas de 80 libras de Hyper Hyper.
En Simpsons no lo aceptan porque no trae corbata
-aunque sea rey de Texcoco- le explican amablemente.
Alguien le pregunta después en algún pub
de dónde es usted originally
y Netza dice México, ah, es todo,
porque ahí nadie sabe exactamente donde está México
ni les importa
porque en los Imperios no aprenden geografía,
porque las islas son el centro del universo.
No me extraña que Copérnico haya sido polaco,
si no, hubiera dicho que Buckingham Palace es el centro
más céntrico de todo el Universo.
Vengan, Dios de los Espejos, Diosa de las Serpientes,
Madre Coatlicue, Señora del Submundo, no se rindan.
Netza, Netza, no te pierdas, no dejes
que la neblina de este país te devore.
No importa, me contesta, el shamán tenía razón.
Londres es como un ensueño, pero frío y oscuro.
¡Ya puedo regresar a la luzl
QUÉ SENCILLO ERA EL MUNDO
Qué sencillo era el mundo
cuando había un Dios y un Diablo
que todo lo descomponían y componían a placer.
Cuando existían Adán y Eva
y la creación del mundo en siete días.
Cuando la Tierra era el centro del Universo
y todo giraba a su alrededor.
Cuando el sol era una esfera perfecta
creada para nuestro solaz, sin manchas ni imperfecciones
y el hombre, era el pináculo de la Creación.
No habían venido todavía
el molesto Darwin con su desagradable teoría de la evolución,
ni Copérnico con su ridículo heliocentrismo.
Ni la física cuántica con su idea de la incertidumbre.
Todo era claro, preciso y conciso.
Las mujeres venían de la costilla de Adán
y nunca nadie se preguntaba nada.
Qué placidez tan angelical.
Era un mundo bárbaro, pero fenomenal.
LA MUERTE DE LO MASCULINO
A mi padre y a mi hermano que fallecieron con un mes de diferencia.
En mi papel de hija menor
la soledad cristalizó
en los ritos cotidianos de mi niñez.
A mí, a la que olvidaban en todo momento,
le llegó la muerte de lo masculino,
como un vendaval que rompe el palo mayor de los barcos,
que doblega el cuello áspero de las palmeras:
a mí, que nunca pensé que me hiciera falta.
Y me quedé huérfana de hombres.
Sin varones que protegieran el futuro de solemnes acontecimientos
o los nombres de familia o las propiedades.
Desprovista de Historia.
Me quedé rota y a la mitad,
con las fábulas truncas,
y enfurecida por mucho tiempo.
Me quedé con esta pequeñez en el alma
de mujer crecida.
Me quedé femenina, absolutamente femenina.
LOS SOBREVIVIENTES
Somos pájaros extintos
colosales y torpes
esperando alzar el vuelo.
Miramos la bóveda celeste
con ojos azorados de pterodáctilo.
Sin saber por qué o para qué
hemos sobrevivido
desastre tras desastre
cobijados por la sombra de nuestras alas
y nos levantamos de nuevo
tras muertes o suicidios.
Nos limpiamos con la servilleta
los dedos embarrados de mierda,
la sangre de los despellejamientos,
el aceite chorreado del desbielo.
Nos peinamos,
nos enjugamos las lágrimas,
limpiamos discretamente el polvo escondido
en los dobleces de la ropa
nos acomodamos el cuello
y nos quedamos parados,
sobreviviendo.
SEJMET
Centelleo de miedo/ de rabia
mientras mis pasos, hundiéndose
en la arena candente,
me conducen al santuario
de la diosa
Sejmet
la leona, la poderosa, la furibunda.
La enloquecida por la fuerza
de su violencia sin contención.
La dueña del viento y el rayo devastador.
La comedora implacable de carne.
En mis manos porto la ofrenda,
de la mujer que ha sido agraviada/ humillada,
dada por segura.
Vengo /agitada/ furiosa /con los pies resucitados
a la impotencia/ a la parálisis.
Traigo plantados los ojos de gato
para ver en la oscuridad infinita del desconcierto.
Traigo enraizadas las garras,
afiladas por la impotencia,
por lo que no dije
durante el pasar de trillones de granos de arena.
Y vengo arrastrando el corazón hecho trizas.
Pero, ¡hasta aquí, madre Sejmet!
Hasta aquí guío a mi persona para adorarte.
Perfecta felina del desierto clitorino.
Remedio poderoso para las almas agraviadas.
Datos vitales
Kyra Galván (México, 1956). Traductora, periodista, poeta y narradora. En 1980 obtuvo el Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino y entre su obra poética destacan Un pequeño moretón en la piel de nadie (1982, 2006), Alabanza escribo (1989), Netzahualcóyotl recorre las islas (1997) e Incandescente (2010).