Presentamos un texto inédito del poeta peruano Víctor Coral (Barranco, Lima, 1968). Estudió Ciencias Administrativas y Literatura en la UNMSM. Fundó la revista literaria Ajos & Zafiros en 1998. Ha publicado los poemarios Luz de Limbo (2001, 2005), Cielo Estrellado (2004), Parabellum (2008), Poseía (2011) y tvpr (2014). También las novelas Rito de paso (Norma, 2008) y Migraciones (2009). Poemas, reseñas y ensayos suyos han sido publicados en Letras Libres, Periódico de Poesía, Luvina, Círculo de Poesía, Letralia, Revista de Crítica Literaria Latinoamericana, Hueso Húmero, entre otras. Ha hecho periodismo cultural en su país en los diarios La República y El Comercio. Actualmente prepara un volumen de ensayos personales y una antología de poesía mexicana actual.
ACRÓSTICO DELEUCIANO
Un libro no tiene objeto ni sujeto, está hecho de materias diversamente formadas, de fechas y de velocidades muy diferentes. Cuando se atribuye el libro a un sujeto, se está descuidando ese trabajo de las materias, y la exterioridad de sus relaciones. Se está fabricando un buen Dios para movimientos geológicos. En un libro, como en cualquier otra cosa, hay líneas de articulación o de segmentaridad, estratos, territorialidades; pero también líneas de fuga, movimientos de desterritorialización y de desestratificación.Las velocidades comparadas de flujo según esas líneas generan fenómenos de retraso relativo, de viscosidad, o, al contario, de precipitación y de ruptura.
(…)
No hay ninguna diferencia entre aquello de lo que un libro habla y cómo está hecho. Un libro tampoco tiene objeto. En tanto que agenciamiento, sólo está en conexión con otros agenciamientos, en relación con otros cuerpos sin órganos. Nunca hay que preguntar qué quiere decir un libro, significado o significante, en un libro no hay nada que comprender, tan sólo hay que preguntarse con qué funciona, en conexión con qué hace pasar o no intensidades, en qué multiplicidades introduce y metamorfosea la suya, con qué cuerpos sin órganos hace converger el suyo.
Gilles Deleuze. “Mil Mesetas”.
Un bosquezuelo abandonado como una gema en medio del desierto o como un
Libro dejado sobre el césped de un parque en la noche supernumeraria,
No una entidad especial, una aparición inexplicable o un superser que
Tiene deberes nadie sabe por quién encargados y poderes que exceden todo
Objeto humano o inhumano conocido; ni siquiera (concebirla) una máquina,
Niun dispositivo natural –¿pero qué es natural ahora?– dominado por un
Sujeto, ¡nada de ello! Es una mata tupida, prieta, cejijunta de arbolillos que
Está desamparada mas de alguna manera bien dispuesta en su soledad de
Hecho,esa orfandad cósmica y desapercibida que le permite vivir así,
De miradas cegadas, de aplicadas ignorancias que le permiten salvar sus
Materias preciosas, sus animalillos nocturnos y sus hongos coloridos
Diversamente dispuestos y conformados de acuerdo con bien
Formadas, saludables morfologías botánicas, cosas que libran bien
Deun gran depredador a aquella guirnalda verdosa enquistada en la arena;
Fechas inexistentes, efemérides inútiles, un mundillo sin historia ni memoria
Ycarente de mayor sentido que su propio funcionamiento autónomo; también
Dedioses vacíos, miserables milagros bajo la sombra de los árboles y muchas
Velocidades de crecimiento en pugna desconocida, en estimaciones ocultas
Muy de otra temperatura óntica, de otros fastos incomprensibles y
Diferentes.
Cuando las bestezuelas del bosquecillos sueltan su último bostezo y
Se desperezan para salir a husmear la vida en esos parajes ahora umbríos,
Atribuye el hombre a un dios o a natura o a cualquier entidad suprema
El honor de esa regulación vital, de esa húmeda dialéctica del morir y no hay
Libro, no hay página web, no hay sabiduría ancestral –menos conocimiento
A priori—cuya entraña alimente su lógica antihumana; y sin embargo es
Un diario fluir de instintos, proyecciones y escapatorias cuyo término y
Sujeto, digamos, es dictado por la muerte (nuestra única certeza) o
Se desliza suavemente entre los finos dedos de nuestras manos en
Está también repetitiva e inacabable tarea de asir lo incognoscible,
Descuidando saberes modestos, mínimos, pero más importantes…
Ese el deber que acaso estamos dejando inconcluso: la comprensión y
Trabajo de aquello que directamente nos atañe, como el picor de piel
De todas las mañanas, la ociosa civilidad del saludo al otro, y claro
Las inútiles formas en que gastamos el tiempo muerto de los viajes y
Materias, siempre apabullantes, que no podemos evitar para llegar
Y emprender un nuevo día, pues uno nuevo comienza no con
La milagrosa vuelta a la vida del sueño, no, sino con la agreste
Exterioridad y el trabajo; y como si ello no bastara, darse cuenta
De que nuestra máquina expendedora de capacidad consumista, y
Sus principales movimientos sobre la piel del mundo, ocultan
Relaciones. Están implicados en una mafia incosciente y mortal:
Se dedican a explotar la natura para convertirla en papeles olorosos,
Está visto con esto y otras cosas, que la vida no se conoce a sí
Fabricando su propio derrumbe, defecando materias delicadas o
Un abanico de productos atractivos, finísimos que esconden el
buen morir de los bosquezuelos con el nuestro, y estoy siendo
Dios,o sea, sarcástico en grado extremo al decir esto, pues
Para qué un hombre, un solo hombre tendría que dedicarse a conocer
Movimientos perversos de su propio mundo, si todavía no domina los
geológicos. Hidrológicos. Climatológicos, que dominan su hábitat
En esa forma tan brutal y obscena con que se manifiesta…
Un día, o una noche, yo también seré una línea o una cifra en el
Libro, ya no habrá espacio ni tiempo para ayes, poemas, luchas y esperanzas,
Como un tronco muerto yo también correrré río abajo atado con otros
En una caravana ridícula que no es otra cosa que el triunfo de la muerte,
Cualquier muerte que se crea, ni siquiera frente a la vida (pues esas tienen
Otra manera de realcionarse) sino frente al ridículo hombre y su endeble
Cosa, su ensoñación fantasiosa de poder; frente a esto, acaso, se dijo
Hay en el mundo un Libro, o más exactamente, todo termina en un Libro,
Líneas retorcidas impotentes somos del final de ese libro abominable,
De esa admirable alucinación febril del poeta y aunque nos rehusemos,
Articulación vana somos de esa brillante idea alucinada, de esa intuición
O superlativa visión, de la cual, nunca lo olvidemos, nada más formamos
De la parte más diseminada y marginal; peor que pies de página, acaso una
Segmentariedad, una excreciencia asimilada, la última planicie de miles de
Estratos, superficies superpuestas, segmentos históricos alguna vez vivos,
Territorialidades;
Pero
También
Líneas
De
Fuga,
Movimientos
De
Desterritorialización
Y
De
Desestratificación.
Las composiciones de este texto, sus
Velocidades se adelgazan ahora, son
Comparadas con una dieta textual, una
De (floración) necesaria del ideario, del
Flujo imaginal, ¿para qué?, pues
Según lo que perseguimos, inasimos,
Esas cosas fugitivas hermanas, meire-
Líneas, meirenadas marinadas marinidan,
Generan espacios de aire y reposo, esos
Fenómenos necesarios antes de la eclosión
De ideas imagos simbolones ¡alegorías!
Retraso o más bien ralentizamiento del rollo
Relativo, ralo, remorático, romo, replétorico
De formaciones germinales, coloraturas y
Viscosidad, de oleoginosas riadas auditivas
O, más bien, y, de pronto, relampangueante
Al borde ya de una mañana, desayunados todos
Contrario, refractante, oclusivo, espejeando
De palabras e ideas germinadas, curadas, asidas,
Precipitación de normas nuevas, ejecución de formas caducas
Y descentradas, desmemoriación de viejos derroteros, aborto
De todas aquellas formaciones geológicas, sustratos del pensar que rehúsen
Ruptura.
Todo es ahora un plano blanco, un enorme lienzo donde iremos dibujando
Eso, aquello que por ahora llamaremos solo eso; por ejemplo,
Las nubes rosadas, naranjas y quemadas que se pintan en el horizonte,
Líneas serradas, nervudas, recortadas de las hojas caídas de los árboles
Y también la opacidad violenta de los cuerpos desconocidos que se pierden,
Las sombras difuminadas adunándose alrededor de las fosas a diversas
Velocidades y en cualquier lugar del mundo, los ayes, los ayes, los ayes
Mensurables, desdeñosos del olvido y de la indiferencia aun del cínico, todo
Constituye solo el tapiz inicial, el paisaje de fondo sobre el que va a danzar
Un encarruselamiento –barrocos somos y como barrocos moriremos–, un
Agenciamiento donde luz – muerte – escritura – vida – pensar – poesía
(Agencement) ils sont.
(…)
No pensar en metáforas, no entregarse a imágenes, dejar que estas vengan,
Hay una entrega creadora donde la entidad es solo un dispositivo por el cual
Ninguna imagen se propala, se genera, solo sirve como caja proyectiva,
Diferencia clave tanto con la creación romántica como con la dispositio surreal;
Entre este estado paciente y creador a la vez, y ese otro en el que el lenguaje,
Aquello que escondemos pero también nos constituye, nos revuelca (ola
De verdades sumergidas aflorantes) y nos deja balbucientes, relucientes,
Lo más eficientes –pero no siempre eficaces—posibles; mas siempre pasa
Que el lenguaje es ese muro donde seremos acribillados por los silencios, o
Un desfiladero por el que rodaremos (o nos deslizaremos finamente) y ni un
Libro siquiera nos salvara de lo que desde el principio siempre fuimos:
Habla, habla que existe o cree que existe, y un día se apaga, flama famélica
Y erotizante, cortante, soberbia, elusiva, dolorosa, incomprendida, torpe,
Cómo esta flama cuyo fin es llegar al otro, llego a creerse que era única y
Está hecha para solaz de sí misma como si viviera un golpe solipsista de
Hecho.
Un poco de delirio serio, compañeros. Otro poco de locura mística… un
Libro no es la respuesta a todo, no es ni siquiera la respuesta a lo mejor,
Tampoco a lo medianamente importante… un libro solo tiene un hesitar,
Tiene las huellas de un acongojante ímpetu inútil, un afán traicionero; el
Objeto. Claro, es el objeto por excelencia, por su autonomía; mas por ello,
En todo el sentido de autonomía mismo, no es más que todo loexistente.
Tanto que imaginamos y hasta conocemos hombres cabales sin libros, y
Que el solo hecho de un universo poblado de libros sin hombres es un
Agenciamiento bluf,un tour de forceimposible, un retorcimiento anómalo
Sólo aceptable en entidades abandonadas al soledío o acaso el estro
Está trabado rastreramente tras rasgaduras rasantes reales roturantes…
En este mundo –ya hablamos de lo Real entonces, lo intentamos—no hay
Conexión entre las partes y el todo, más, no hay visión del todo, tenemos
Con el todo una relación de abandono, de orfandad holística, y peor con los
Otros, los lisiados, los marginados, los migrados, los excluidos, los viudos,
Agenciamientos, nuevamente, imposibles, obturados por la forma de ser
En acción actualmente, por esta irrenunciable aceptación del consumo, la
Relación interesada, parasitaria, vulgar, írritante, roñosa, melosa de vernos
Con los demás y sin los demás, ¡vernos demás! Porque el que no ve los
Otros, no ve nada sino su propio cuerpo transido por el deseo negro de los
Cuerpos envilecidos por sus necesidades y las pústulas adheridas a su piel
Sin defensas para los malos influjos autoinmunes que opacan más sus
Órganos. Y no, pues, nunca hay que preguntar qué es un cuerpo, no,
Nunca preguntarse qué fue un alma (porque el alma ya fue, ¿no?), lo que
Hay que preguntarse, siempre, hasta dejar de entender la pregunta, señal de
Que sitiamos la respuesta, es qué hay detrás de ese bosquezuelo prístino,
Preguntar qué detrás de una lengua que no se soporta sino con imágenes,
Qué dejan en cuanto pueden y qué revelan, y por qué tantos dicen: “Eso nadie
Quiere”, y sin embargo están allí, callán cuando esas palabras dicen su propio
Decir…
Un mundo profanado ahora, un mundo lleno de hendijas, de horadaciones…
Libro, pero libro agujereado de oscuras llagas, y en cada llaga muchas vidas,
Un muerto sentado al pie de cada fosa contando la historia de cada hermana,
significado o significante sin significado ambos, solo un decir en la alta
O baja madrugada, mascullando las humillaciones, los espantos con el
Significante, con el simbolom escarnecido que no aguanta tanto dolor
En su lagartija, en su cajón, detrás de su retrato, en su carta ajada y, pues
Un trans dirá su verdad con esta su lengua, una mujer dirá su verdad sobre su
Libro sobre la mujer de su vida, la pareja de chicos guapos e idos dirán:
No ahora sí, porque la muerte con uniforme nunca les dejo decir nada, y
Hay mucho más, claro, los campesinos de esta mi tierra grande que fueron
Nada para los que los defendían tanto como para los que los despreciaban, y
Que hay que
Comprender, por favor
Tan poco hay que ponerse en plan reivindicante, es
Sólo que algunas noches sueño que
Hay tierras sin fin sembradas de huecos, oscuros, profundos
Que tienen a hombres y mujeres sentados al borde hablando cosas y cómo no
Preguntarse cómo es que sigue yendo este mundo del deseo y el consumo
Con estas tierras agujereadas en México, Perú, EE UU, Colombia, Bosnia…
Qué país no conoce una fosa, diez, mil fosas, y sigue así, progresa
Funciona sigue adelante mira adelante hay compromiso olvida
En eso llegamos a una cruz ética, olvida, ¡olvidemos todo!
Conexión hagamos con lo mejor de nosotros que es lo peor de nosotros,
Con el mirar al otro lado, el subir la ventanilla del carro, con aplastar el
Qué, el perrito, el sin techo, el ebrio insultante hijo de puta…
Hace frió, sabe, todo debe desaparecer, y si no se puede, debe
Pasar lo que puede pasar, y eso es lo que tenemos ahora
O ¿usted quiere una revuelta con qué medios y armas y con qué convencidos?
No, el mundo es decididamente un terreno agujereado de fosas, fosas e
Intensidades, fosas y duplicidades, fosas y olvidos, sobre todo, fosas
En irish, en bosnio, en esloveno, en nahua, en mapuche, en pali en
Qué te falta para que te dés cuenta que vives sobre un murmullo de ayes, de
Multiplicidades de lenguas y posturas sobre las muy parecidas muertes, ah,
Introduce el cobarde argumento de mi falta de experiencia directa, ¿sabes?
Y recuérdalo bien, cada cierto tiempo sueño que mi cuerpo se
Metamorfosea en campo agujereado y en mi mente retumban mil lenguas en
La alta letanía de quejanías y lejanías por nadie hasta ahora escuchadas, no,
Suya, exclusivamente suya no es la culpa; es más, no hay culpa, baste
Con que sueñe que mi cuerpo sea agujereado y mi mente abrumada por ayes
Qué ser podría soportar esta horrible epifanía de nuestro tiempo!!!
Cuerpos horadados, con órganos maltrechos, solo pueden evadirse en figuras
Sin
Órganos, todo ello, nebulosa pero certeramente,
Hace
Converger
El cuerpo del texto, el cuerpo de lo imaginario y el cuerpo real, horrible; el
Suyo.