Manifiesto antropófago. Oswald de Andrade

Leemos, en la nueva versión de Indira Díaz, el "Manifiesto antropófago" de Oswald de Andrade. En 1926 junto a Tarsila do Amaral funda el Movimiento Antropófago, en el que propone que tanto en la literatura como en la pintura, Brasil debe devorar la cultura extranjera y crear una cultura revolucionaria propia. En mayo de 1928 presenta su Manifiesto Antropófago.

 

 

 

 

Oswald de Andrade (São Paulo, 1890).​​ Escritor y dramaturgo brasileño. Representa uno de los principales impulsores del proceso de implantación y definición de la literatura modernista. En 1926​​ junto a Tarsila do Amaral​​ funda el Movimiento Antropófago, en el que propone que tanto en​​ la literatura como en​​ la pintura, Brasil debe devorar la cultura extranjera y crear una cultura revolucionaria propia. En mayo de 1928 presenta su Manifiesto Antropófago. En este​​ manifiesto figuran personajes como Alencar quien fue autor de la primera gramática tupi cofundador de São Paulo y fundador de Iritiba, actual Anchieta; Antonio de Mariz, sacerdote brasileño que defendió los derechos de los indígenas. También hace mención a los caraíbas un pueblo indígena de las pequeñas Antillas;​​ y a​​ la invocación de origen tupi​​ catiti​​ para invocar​​ a​​ la luna nueva, a Guaraci, dios del sol y a Jaci diosa de la luna en la mitología tupi-guarani. El Manifiesto se encuentra lleno de referencias que aluden a protagonistas de leyendas de origen tupi,​​ pero también contiene una visión​​ de la​​ realidad brasileira que busca los orígenes de su nacionalismo, valorizando críticamente el pasado histórico​​ y​​ cultural, ironizando la historia de la colonización. ​​ ​​ ​​ ​​​​ 

Indira Díaz

 

 

 

 

 

 

***

 

 

 

 

Manifiesto antropófago

 

Sólo la antropofagia nos une. Socialmente. Económicamente. Filosóficamente.

Única ley del mundo. Expresión enmascarada de todos los individualismos, de todos los colectivismos. De todas las religiones. De todos los tratados de paz.

Tupi or not tupi that is the question.

Contra todas las catequesis. Y contra las madres de los Gracos.

Sólo me interesa lo que no es mío. Ley del hombre. Ley del antropófago.

Estamos cansados de todos los sospechosos​​ maridos católicos​​ envueltos en dramas. Freud terminó con el enigma​​ de la mujer y con los sustos de la psicología impresa.

Lo que obstaculizaba la verdad era la ropa, el impermeable entre el mundo interior y el mundo exterior. La reacción contra el hombre vestido. El cine americano lo informará.

Hijos del sol, madre de los vivientes. Encontrados y amados ferozmente, con toda la hipocresía de la saudade, por los inmigrantes, por los traficados y por los turistas. En el país de la gran​​ cobra.

Fue porque nunca tuvimos gramáticas, ni colecciones de vegetales viejos. Y nunca supimos lo que era urbano, suburbano, fronterizo y continental. Perezosos en el mapamundi de Brasil.

Una conciencia participante, una rítmica religiosa.

Contra todos los importadores de conciencia enlatada. La existencia palpable de la vida. Y la mentalidad prelógica para ser estudiada por el Sr. Lévy Bruhl.

Queremos la revolución Caraíba. Más grande que la revolución​​ Francesa. La unificación de todas las revueltas eficaces en dirección del hombre. Sin nosotros Europa no tendría si quiera su pobre declaración de los derechos del hombre.

La edad de oro anunciada por América. La edad de oro. Y todas las girls.

Filiación. El contacto con​​ el Brasil Caraíba.​​ Où Villegaignon print terre. Montaigne.​​ El hombre natural. Rosseau. De la Revolución Francesa al Romanticismo, a la Revolución Bolchevique, a la revolución Surrealista y al bárbaro tecnificado de Keyserling. Caminamos.

Nunca fuimos catequizados. Vivimos a través de un derecho sonámbulo hicimos que Cristo naciera en Bahia. En​​ Belém o en Pará.

Pero nunca admitimos el nacimiento de la lógica entre nosotros.

Contra el padre Viera. Autor de nuestro primer​​ préstamo para ganar​​ su​​ comisión. El rey analfabeto que le dijo: ponga eso en el papel, pero sin tanta labia. Se hizo el préstamo. Se registró el azúcar brasileño. Viera dejó el dinero en Portugal y nos trajo la labia.

El espíritu se rehúsa a concebir el espíritu sin el cuerpo. El antropomorfismo. Necesidad de la vacuna antropofágica. Para el equilibrio contra las religiones del​​ meridiano. Y las inquisiciones exteriores.

Sólo podemos atender al mundo oracular.

Teníamos la justicia,​​ codificación de la venganza. La ciencia,​​ codificación de la Magia. Antropofagia. La transformación permanente del Tabú en Tótem.

Contra el mundo reversible y las ideas objetivadas. Cadaverizadas. El stop del pensamiento que es dinámico. El individuo víctima del sistema. Fuente de las injusticias clásicas. De las injusticias románticas. El olvido de las conquistas interiores.

Itinerarios, Itinerarios, Itinerarios, Itinerarios, Itinerarios, Itinerarios, Itinerarios.

El instinto Caraíba.

Muerte y vida de las hipótesis. De la ecuación​​ yo​​ parte del Cosmos al axioma Cosmos parte del​​ yo. Subsistencia. Conocimiento. Antropofagia.

Contra las elites vegetales. En comunicación con el suelo.

Nunca fuimos catequizados.​​ Lo que hicimos fue el Carnaval. El indio vestido como senador del Imperio. Fingiendo ser Pitt. O figurando en las óperas de Alencar lleno de buenos sentimientos portugueses.

Ya teníamos el comunismo. Ya teníamos la lengua surrealista. La edad de oro.

Catiti Catiti​​ Imara Notiá ​​​​ Notiá Imara​​ Ipeju

La magia y la vida. Teníamos la relación y la distribución​​ de los bienes físicos, de los bienes morales, de los bienes dignatarios. Y sabíamos transponer el misterio y la muerte con la ayuda de algunas formas gramaticales.

Pregunté a un hombre lo que era el Derecho.​​ Él me respondió que era la garantía del ejercicio de la posibilidad. Ese hombre se llamaba​​ Galli Mathias. Me lo comí.

Sólo no hay determinismo donde hay misterio. ¿Pero qué conseguimos nosotros con eso?

Contra las historias del hombre que comienzan en Cabo Finisterra.​​ El mundo no fechado. No rubricado.

Sin Napoleón. Sin César.

La fijación del progreso por medio de catálogos y aparatos de televisión. Sólo la maquinaria. Y los transfusores de sangre.

Contra las sublimaciones antagónicas. Traídas en las carabelas.

Contra la verdad de los pueblos misioneros, definida por la sagacidad de un antropófago, el Vizconde de Cairu:​​ -La mentira repetida muchas veces.

Pero no fueron cruzados los que vinieron. Fueron fugitivos de una civilización que estamos devorando, porque somos fuertes y vengativos como el Jabuti.

Si Dios es la conciencia del universo Increado,​​ Guarací es la madre de los vivientes. Jaci es la madre de los vegetales.

No teníamos​​ especulación. Pero teníamos adivinación. Teníamos política que es la ciencia de la distribución. Y un sistema social planetario.

Las migraciones. La fuga de los estados tediosos. Contra las esclerosis urbanas. Contra los Conservatorios y el tedio especulativo.

De William James y Voronov.​​ La transfiguración del Tabú en Tótem. Antropofagia.

El pater familias y la creación de la moral de la cigüeña: Ignorancia real de las cosas + habla de imaginación + sentimiento de autoridad ante la prole curiosa.

Es necesario partir de un profundo ateísmo para llegar a la idea de Dios. Pero la Caraíba no lo necesitaba. Porque tenía a Guaraci.

El objetivo creado​​ reacciona con los Ángeles de la Caída. Después Moisés divaga ¿Qué ganamos nosotros con eso?

Antes de que los portugueses descubrieran Brasil, Brasil ya había descubierto la felicidad.

Contra el indio de antorcha. El indio hijo de María, ahijado de Catarina de Médecis y yerno de D. Antonio de Mariz.

La alegría es la prueba del​​ nueve.

En el matriarcado de Pindorama.

Contra la memoria fuente de costumbre. La experiencia personal renovada.

Somos concretistas. Las ideas dominan, reaccionan, queman gente en las plazas públicas. Suprimamos las​​ ideas​​ y las otras parálisis. Por los itinerarios. Creer en las señales, creer en los instrumentos y en las​​ estrellas.

Contra Goethe, la madre de los Gracos, y la Corte de D. João VI.

La alegría es la prueba del​​ nueve.

La lucha entre lo que se llamaría Increado y la Criatura- ilustrada por la contradicción permanente​​ entre el​​ hombre y su Tabú. El amor cotidiano es el modus vivendi capitalista. Antropofagia. Absorción del enemigo sacro. Para transformarlo en tótem. La humana aventura. La finalidad terrenal. Sin embargo, sólo las puras élites​​ han conseguido​​ realizar la antropofagia carnal, que trae en sí​​ el más alto sentido de la vida y evita todos los males identificados por Freud, males catequistas. Lo que se da no es una sublimación​​ del instinto sexual. Es la escala termométrica del instinto​​ antropofágico. De lo carnal, se vuelve electivo y crea amistad. Afectivo, el amor. Especulativo, la ciencia. Se desvía se transfiere. Llegamos al envilecimiento. La baja antropofagia aglomerada en los pecados del catecismo – la envidia, la usura, la calumnia, el asesinato. Peste de los llamados pueblos cultos y cristianizados, es contra ella que estamos actuando. Antropófagos.​​ 

Contra Anchieta cantando las once mil vírgenes del cielo, en la tierra de Iracema, el patriarca João Ramalho​​ fundador de São Paulo.

Nuestra independencia aún no fue proclamada. Frase típica de D.​​ João​​ VI:- Hijo mío​​ ¡pon esa corona en tu cabeza, antes de que algún aventurero lo haga!​​ Expulsamos la dinastía. Es preciso expulsar el espíritu​​ de Bragança,​​ las​​ órdenes​​ y el rapé de María da Fonte.

Contra la realidad social, vestida y opresora, registrada por Freud- la realidad sin complejos, sin locura, sin prostituciones y sin cárceles del matriarcado de Pindorama.

 

 

 

 

Oswald de Andrade

Publicado originalmente en Revista de Antropofagia,​​ 

Año 1, No. 1, mayo de 1928

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

MANIFESTO ANTROPÓFAGO

 

Só a ANTROPOFAGIA nos une. Socialmente. Economicamente. Filosoficamente.​​ 

Única lei do mundo. Expressão mascarada de todos os individualismos, de todos os coletivismos. De todas as religiões. De todos os tratados de paz.​​ 

Tupi, or not tupi that is the question.

Contra todas as catequeses. E contra a mãe dos Gracos.​​ 

Só me interessa o que não é meu. Lei do homem. Lei do antropófago.​​ 

Estamos fatigados de todos os maridos católicos suspeitos postos em​​ 

drama. Freud acabou com o enigma mulher e com os sustos da psicologia impressa.​​ 

O que atropelava a verdade era a roupa, o impermeável entre o mundo interior e o mundo exterior. A reação contra o homem vestido. O cinema americano informará.​​ 

Filhos do sol, mãe dos viventes. Encontrados e amados ferozmente, com toda a hipocrisia da saudade, pelos imigrados, pelos traficados e pelos touristes. No país da cobra grande1 .​​ 

Foi porque nunca tivemos gramáticas, nem coleções de velhos vegetais. E nunca soubemos o que era urbano, suburbano, fronteiriço e continental. Preguiçosos no mapa-múndi do Brasil2 .​​ 

Uma consciência participante, uma rítmica religiosa.​​ 

Contra todos os importadores de consciência enlatada. A existência palpável da vida. E a mentalidade pré-lógica para o Sr. Lévy-Bruhl estudar.

Queremos a Revolução Caraíba3 . Maior que a revolução Francesa. A unificação de todas as revoltas eficazes na direção do homem. Sem nós a Europa não teria sequer a sua pobre declaração dos direitos do homem.​​ 

A idade de ouro anunciada pela América. A idade de ouro. E todas as girls.

Filiação. O contato com o Brasil Caraíba.​​ Ori Villegaignon print terre. Montaigne.​​ O homem natural. Rosseau. Da Revolução Francesa ao Romantismo, à Revolução Bolchevista, à revolução Surrealista e ao bárbaro tecnizado de Keyserling. Caminhamos.​​ 

Nunca fomos catequizados. Vivemos através de um direito sonâmbulo. Fizemos Cristo nascer na Bahia. Ou em Belém do Pará.​​ 

Mas nunca admitimos o nascimento da lógica entre nós.​​ 

Contra o Padre Vieira4 . Autor do nosso primeiro empréstimo, para ganhar comissão. O rei-analfabeto disseralhe: ponha isso no papel mas sem muita lábia. Fez-se o empréstimo. Gravou-se o açúcar brasileiro. Vieira deixou o dinheiro em Portugal e nos trouxe a lábia.​​ 

O espírito recusa-se a conceber o espírito sem o corpo. O antropomorfismo. Necessidade da vacina antropofágica. Para o equilíbrio contra as religiões de meridiano. E as inquisições exteriores.​​ 

Só podemos atender ao mundo orecular.​​ 

Tínhamos a justiça codificação da vingança. A ciência codificação da Magia. Antropofagia. A transformação permanente do Tabu em totem.​​ 

Contra o mundo reversível e as idéias objetivadas. Cadaverizadas. O stop do pensamento que é dinâmico. O indivíduo vítima do sistema. Fonte das​​ injustiças clássicas. Das injustiças românticas. E o esquecimento das conquistas interiores.​​ 

Roteiros. Roteiros. Roteiros. Roteiros. Roteiros. Roteiros. Roteiros.​​ 

O instinto Caraíba.​​ 

Morte e vida das hipóteses. Da equação eu parte do Cosmos ao axioma Cosmos parte do eu. Subsistência. Conhecimento. Antropofagia.​​ 

Contra as elites vegetais5 . Em comunicação com o solo.​​ 

Nunca fomos catequizados. Fizemos foi o Carnaval. O índio vestido de senador do Império. Fingindo de Pitt. Ou figurando nas óperas de Alencar cheio de bons sentimentos portugueses6 .​​ 

Já tínhamos o comunismo. Já tínhamos a língua surrealista. A idade de ouro.​​ 

Catiti Catiti7​​ 

Imara Notiá​​ 

Notiá Imara​​ 

Ipeju8​​ 

A magia e a vida. Tínhamos a relação e a distribuição dos bens físicos, dos bens morais, dos bens dignários. E sabíamos transpor o mistério e a morte com o auxílio de algumas formas gramaticais.​​ 

Perguntei a um homem o que era o Direito. Ele me respondeu que era a garantia do exercício da possibilidade. Esse homem chama-se Galli Mathias. Comi-o.

 

Só não há determinismo onde há o mistério. Mas que temos nós com isso?​​ 

Contra as histórias do homem que começam no Cabo Finisterra9 . O mundo não datado. Não rubricado.​​ 

Sem Napoleão. Sem César.​​ 

A fixação do progresso por meio de catálogos e aparelhos de televisão. Só a maquinaria. E os transfusores de sangue.​​ 

Contra as sublimações antagônicas. Trazidas nas caravelas.​​ 

Contra a verdade dos povos missionários, definida pela sagacidade de um antropófago, o Visconde de Cairu10: - É mentira muitas vezes repetida.​​ 

Mas não foram cruzados11 que vieram. Foram fugitivos de uma civilização que estamos comendo, porque somos fortes e vingativos como o Jabuti12 .​​ 

Se Deus é a consciência do universo Incriado, guaraci13 é a mãe dos viventes. Jaci13 é a mãe dos vegetais.​​ 

Não tivemos especulação. Mas tínhamos adivinhação. Tínhamos Política que é a ciência da distribuição. E um sistema social-planetário.​​ 

As migrações. A fuga dos estados tediosos. Contra as escleroses urbanas. Contra os Conservatórios e o tédio especulativo.​​ 

De William James e Voronoff. A transfiguração do Tabu em totem. Antropofagia.​​ 

O pater famílias e a criação da Moral da Cegonha14: Ignorância real das coisas + fala (sic.) de imaginação + sentimento de autoridade ante a prole curiosa.​​ 

É preciso partir de um profundo ateísmo para se chegar à idéia de Deus. Mas a caraíba não precisava. Porque tinha Guaraci.​​ 

O objetivo criado reage como os Anjos da Queda. Depois Moisés divaga. Que temos nós com isso?​​ 

Antes dos portugueses descobrirem o Brasil, o Brasil tinha descoberto a felicidade.​​ 

Contra o índio de tocheiro. O índio filho de Maria15, afilhado de Catarina de Médicis e genro de D. Antônio de Mariz.​​ 

A alegria é a prova dos nove16 .​​ 

No matriarcado de Pindorama17 .​​ 

Contra a Memória fonte do costume. A experiência pessoal renovada.

 

Somos concretistas. As idéias tomam conta, reagem, queimam gente nas praças públicas. Suprimamos as idéias e as outras paralisias. Pelos roteiros. Acreditar nos sinais, acreditar nos instrumentos e nas estrelas.​​ 

Contra Goethe, a mãe dos Gracos, e a Corte de D. João VI18 .​​ 

A alegria é a prova dos nove.​​ 

A luta entre o que se chamaria Incriado e a Criatura - ilustrada pela contradição permanente do homem e o seu Tabu. O amor cotidiano e o modusvivendi capitalista. Antropofagia. Absorção do inimigo sacro. Para transformá-lo em totem. A humana aventura. A terrena finalidade. Porém, só as puras elites conseguiram realizar a antropofagia carnal, que traz em si o mais alto sentido da vida e evita todos os males identificados por Freud, males catequistas. O que se dá não é uma sublimação do instinto sexual. É a escala termométrica do instinto antropofágico. De carnal, ele se torna eletivo e cria a amizade. Afetivo, o amor. Especulativo, a ciência. Desvia-se e transfere-se. Chegamos ao aviltamento. A baixa antropofagia aglomerada nos pecados de catecismo - a inveja, a usura, a calúnia, o assassinato. Peste dos chamados povos cultos e cristianizados, é contra ela que estamos agindo. Antropófagos.

​​ Contra Anchieta19 cantando as onze mil virgens do céu, na terra de Iracema20, - o patriarca João Ramalho fundador de São Paulo.​​ 

A nossa independência ainda não foi proclamada. Frase típica de D. João VI: - Meu filho, põe essa coroa na tua cabeça, antes que algum aventureiro o faça21! Expulsamos a dinastia. É preciso expulsar o espírito bragantino, as ordenações e o rapé de Maria da Fonte22 .​​ 

Contra a realidade social, vestida e opressora, cadastrada por Freud - a realidade sem complexos, sem loucura, sem prostituições e sem penitenciárias do matriarcado23 de Pindorama.

​​ 

 

Oswald de Andrade​​ 

Em Piratininga24​​ 

Ano 374 da Deglutição do Bispo​​ Sardinha25 (Revista de Antropofagia, Ano I, No. I, maio de 1928.)

 

 

 

 

También puedes leer