Presentamos un poema del narrador y poeta Miguel Torga, seudónimo de Adolfo Correia da Rocha (1907-1995). Fue colaborador de la revista Presença, que dirigió José Regio y que congregó a los autores del segundo modernismo portugués. Miguel Torga es conocido mayormente por sus novelas y cuentos, sin embargo su obra poética es breve y de un formalismo clásico de gran intensidad. La versión de su poema “Libro de de horas” está a cargo del poeta Mijail Lamas.
LIBRO DE HORAS
por Miguel Torga
Aquí, frente a mí mismo
yo, pecador, me confieso
de ser así como soy.
Me confieso lo bueno y lo malo
que va en el timón de la nave
en esta deriva en que voy.
Me confieso
poseso
de virtudes teologales
que son tres,
y de los pecados mortales,
que son siete,
cuando la tierra no repite
que son más.
Me confieso
el dueño de mis horas
de las cuchilladas ciegas y rabiosas
y de las ternuras lúcida y mansas.
Y de ser, de cualquier modo
andanzas
del mismo todo.
Me confieso de ser charco
y luna de charco, la mezcla.
De ser la cuerda del arco
que tira las saetas por arriba
y debajo de mi estatura.
Me confieso de ser todo
lo que pueda nacer de mí.
De tener raíces en el suelo
de mi propia condición.
Me confieso de Abel y de Caín.
Me confieso de ser hombre.
De ser un ángel caído
del cielo que dios gobierna;
de ser un monstruo salido
del hoyo más hondo de la caverna.
Me confieso de ser yo.
¡Yo, tal como vengo
a decir que soy yo
delante de mí!